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 Pontifical Council for the Pastoral Care of Migrants and Itinerant People

People on the Move

N° 102, December 2006

 

 

Documento final 

Reunión de los Directores Nacionales 

para la Pastoral del Turismo en Europa

(Roma, 6-7 noviembre 2006)

 

 

I. El Hecho

 

El turismo, una realidad transversal: aspectos pastorales. Teniendo en cuenta este tema central, se ha desarrollado la Reunión de los Directores nacionales para la pastoral del turismo en Europa, con la presencia de los delegados de 15 países (Austria, Bélgica, Bielorrusia, Rep. Checa, Chipre, Croacia, España, Francia, Grecia, Italia, Luxemburgo, Macedonia, Polonia, Portugal y Suiza), y los representantes de algunos Dicasterios y Organismos de la Curia Romana, del C.C.E.E. y del Vicariato de Roma. Las dos jornadas de trabajo del 6 y 7 de noviembre de 2006, se han desarrollado en la sede del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes, que ha organizado el encuentro como momento de profundización, de fraternidad y de diálogo constructivo.

Para comenzar, los participantes han concelebrado la Eucaristía, centro de la comunión eclesial, presidida por el Cardenal Renato Raffaele Martino, Presidente del Dicasterio. Al dirigir sus palabras de bienvenida, el Purpurado ha afirmado en su homilía que el anuncio del Señor Jesús está y debe estar en el centro de la pastoral del turismo, que corresponde a la búsqueda de Dios y a la sed de salvación de la humanidad. Seguidamente, el Eminentísimo Presidente ha comentado los textos de la Liturgia del día, recordando que el Evangelio es escuela de convivencia y ha pedido la protección de la Virgen María, icono de la Iglesia, en el camino de las dos jornadas de trabajo a favor de la evangelización del turismo, nuevo areópago.

Durante su saludo de apertura de los trabajos, S. Em. Martino ha retomado el tema de la prioridad del anuncio de Jesucristo y la importancia que tienen los aspectos pastorales en el mundo del turismo. Ha invitado a los europeos a redescubrir sus propias raíces cristianas, partiendo de la luz que emana el Concilio Ecuménico Vaticano II. Asimismo, Su Eminencia ha recomendado la búsqueda del camino para una nueva evangelización, la nueva evangelización del amor y del respeto. Ciertamente, el turismo puede impulsar los valores presentes en él, ya que gran parte de los monumentos y de las obras de arte que se visitan en Europa son de inspiración cristiana. En efecto – ha proseguido el Cardenal – se puede afirmar que la ‘cultura europeaÂ’ se basa en tres columnas que son: la filosofía griega, el derecho romano y la fe en Cristo.

Además, Su Eminencia ha animado a un compromiso de estudio para anunciar hoy a Cristo a los turistas, a los visitadores que vienen a Europa, a los que trabajan intensamente a fin de que otros gocen de su tiempo libre y de sus vacaciones, así como a todos los que en diferente nivel están ligados al mundo del turismo. Finalmente, el Sr. Cardenal ha expresado su deseo de que en las dos jornadas de trabajo, en un clima de serenidad y de diálogo, en la recíproca escucha y sobre todo “con los ojos y el corazón abiertos”, se identifiquen algunas respuestas “para el bien de quienes han sido confiados a nuestra solicitud pastoral”.

Por su parte, el Secretario del Pontificio Consejo, el Arzobispo Agostino Marchetto, en su intervención introductoria a los trabajos, ha invitado a los participantes a considerar el Concilio Ecuménico Vaticano II, interpretado correctamente, como brújula de orientación para la sociedad europea actual, marcada por la movilidad humana, siendo el turismo un componente muy importante de la misma.

Ha ilustrado también el tema de la reunión en su aspecto general, es decir, “el turismo como realidad transversal”, ya que comprende varios ámbitos e influye en varios sectores de la vida, y con el pasar del tiempo condiciona incluso el mismo desarrollo. El Arzobispo se ha referido al contexto cultural, social, económico y humano del turismo. Pasando a los aspectos pastorales, ha puesto en evidencia que la transversalidad es también una característica de la correspondiente pastoral específica, que cada vez más deberá dilatar su compromiso, integrándose incluso en la pastoral ordinaria, en sectores como la familia, la escuela, los jóvenes, la promoción social, la justicia y la paz, y la gestión de los bienes culturales. En la actualidad, no es posible dejar de lado otro aspecto transversal pastoral, esto es, la atención al ecumenismo y al diálogo interreligioso, mientras no debe faltar el diálogo entre Iglesia local de origen y de llegada de los turistas para asistirlos espiritual y cristianamente. También este tema es transversal.

Por tanto, se deberán identificar formas para reforzar la presencia de la Iglesia en el mundo del turismo en perspectivas de evangelización y transversalidad, fortalecidos por los resultados conseguidos hasta ahora especialmente teniendo en cuenta el último congreso mundial en Bangkok, comprometidos en la actuación de sus Recomendaciones.

Asimismo, Mons. Marchetto ha insistido en la necesidad de intensificar la colaboración con quienes tienen responsabilidades en el turismo, tanto en ámbito público como en la iniciativa privada, subrayando una vez más que es necesario profundizar la formación de los Agentes de pastoral en la óptica transversal, al mismo tiempo que se busque una adecuada preparación de los fieles a fin de que sean operadores de un turismo con un rostro nuevo. Un turismo, esto es, capaz de traducir en realidades sus capacidades de diálogo y promoción de la paz, de ayuda al desarrollo y conocimiento de la memoria de otros pueblos, de crecimiento espiritual.

Seguidamente, han tomado la palabra algunos Delegados nacionales.

Por Austria, en representación del Sr. Anton Wintersteller, Presidente del Círculo de trabajo para la pastoral del turismo, el Revdo. P. Joseph Farrugia ha hablado sobre la situación general del país. Ha informado que se ha notado un aumento de presencias, especialmente en las ciudades. En particular, Viena y Salisburgo han recibido el mayor número de visitadores durante este “Año de Mozart”. De la primavera al otoño –ha añadido– aumenta el llamado “turismo veraniego ligero” y aquel invernal se desarrolla sobre todo en el Tirol y en la provincia de Salisburgo, sin provocar daños al ambiente. Además, un número cada vez mayor de personas, encuentra beneficio durante las vacaciones en los “centros de bienestar” y en las excursiones. Se nota también un aumento de las peregrinaciones, así como de los llamados “recorridos de meditación”.

En lo que se refiere al cuidado pastoral, el P. Farrugia ha dicho que en algunas ciudades los visitadores reciben impresos con palabras de bienvenida e informaciones religiosas. También se celebran servicios religiosos destinados a los turistas, como la Misa en varias lenguas, a cargo del Centro Religioso Internacional de Viena (www.virc.at). 

Ha informado sobre la organización de seminarios para “guías eclesiales”, con la creación de un sitio web referente a los “recorridos de peregrinación” y a los “recorridos de meditación”: www.pilgerwege.at, y luego de una cooperación con las autoridades civiles en materia de “ética del turismo”, de la promoción de peregrinaciones para los que trabajan en el sector turístico, así como de conferencias y simposios con ocasión de la Jornada Mundial.

La intervención de la Comisión nacional de Bélgica “Iglesia y Turismo” ha estado a cargo de los Revdos. Sacerdotes Jacques Riga y Paul Van Zeir, presidente y vice-presidente, respectivamente, que han puesto el acento en las siguientes necesidades: adaptar la pastoral del turismo a la actual evolución de la industria turística, a través de la profundización de los aspectos referentes a la espiritualidad, ofreciendo una interpretación religiosa y simbólica del patrimonio religioso; difundir una información cada vez más competente, ya sea a través de los medios de comunicación tradicionales, o empleando los modernos sitios Internet; favorecer una política de acogida y formar las personas a la hospitalidad; instalar áreas específicas y participar en la formación del personal; sensibilizar a los turistas para que mantengan un comportamiento “digno y humano”, abierto al encuentro (virtudes cristianas y humanas); promover formas alternativas y conviviales de turismo; entrar en relación y crear sinergias con los profesionales en la materia y las instituciones turísticas y culturales, así como con las instituciones y las organizaciones que obran tanto en el plano regional, como nacional, europeo y mundial; colaborar con todas las instancias y los grupos de presión (moral) a favor de la dignidad del hombre en este ámbito específico; en fin, hacer que los cristianos comprometidos en la pastoral del turismo tomen conciencia de que para lograr credibilidad, deben ser competentes y al mismo tiempo manifestarlo activamente.

S.E. Mons. Ladislav Hucko, Secretario general de la Conferencia Episcopal Checa, ha observado que el clero y los fieles se están dando cuenta que es preciso que seamos más activos en la captación de las ocasiones pastorales que ofrece el turismo actual.

En toda la República, hay hermosas oportunidades para transcurrir vacaciones en lugares de oración y meditación. Los visitan no solamente los fieles, sino también personas que buscan el sentido profundo de su vida, e incluso que se declaran ateas. El testimonio de los buenos servicios y la honestidad del personal crean, pues, una base para poder iniciar una relación profunda con los “clientes”. En la Facultad de Teología de la Universidad de Praga se ha abierto y está en su fase inicial un Instituto de historia del arte cristiano. Según Mons. Hucko, se espera que de allí puedan nacer también nuevos guías turísticos.

Una de las posibilidades –aunque todavía es poco explotada– está constituida por los conciertos en las iglesias de Praga, que son visitadas por gran número de personas.

S.E. Mons. Antoni Dziemianko, Administrador Apostólico de la Archidiócesis de Minsk-Mohilëv, ha presentado la situación del turismo en Bielorrusia, poniendo de relieve que en su mayoría los grupos están formados por jóvenes. Los acompañan guías especializados que, con ocasión de la visita a las iglesias, ofrecen la oportunidad al sacerdote para que dirija unas palabras y, por tanto, presente un mensaje espiritual, con la transmisión de valores morales y la narración de la vida de los santos. Para muchos, que nunca han escuchado hablar de Dios, puede constituir un primer contacto con la religión. Otro modo de llegar al corazón de los turistas con un mensaje de fe es la oferta de objetos religiosos durante las visitas. Mons. Dziemianko ha mencionado también que por invitación del Ministerio del Turismo y del Deporte, ha participado en una reunión sobre el desarrollo del turismo en Bielorrusia, en la que se solicitó la colaboración eclesial sobre el particular. 

El obispo ha pedido luego a los responsables nombrados por él para la pastoral turística en la archidiócesis que preparen guías de varios lugares turísticos con atención a las cuestiones espirituales. Ha invitado también a los párrocos para que coloquen con evidencia informaciones sobre la parroquia, con un proyecto para imprimir “un pequeño catecismo para turistas”, que contenga también las direcciones de las iglesias y de los sacerdotes. Asimismo, Mons. Dziemianko ha expresado el deseo decontar con una mayor colaboración con las agencias de viaje de Europa occidental, en particular con aquellas católicas, para que haya guías turísticos que hablen ruso en los lugares que se visitan en Europa.

La Iglesia ortodoxa en Bielorrusia, con iglesias de interés histórico-artístico y lugares de peregrinación, tiene la intención de abrir una facultad que se dedique a la especialización en turismo.

El Revdo. P. Umberto Barato, ofm, Vicario patriarcal para Chipre, ha explicado que sobre todo en los últimos años la isla se ha convertido en meta de vacaciones para muchas personas. De hecho, su posición natural, el paisaje que se extiende de las playas hasta las colinas y las montañas, los innumerables sitios arqueológicos, el clima suave y la acogedora actitud de sus habitantes, hacen que esta isla sea un lugar ideal para el descanso.

La mayoría de los turistas –ha añadido– son europeos, en particular ingleses y escandinavos. La atención espiritual está asegurada por la Iglesia anglicana (Diócesis de Chipre y del Golfo), por la Iglesia católica con cuatro parroquias presentes en las principales ciudades, por los Luteranos de Suecia y Alemania, y por otras Confesiones protestantes.

Un aspecto particular que merece mención –ha dicho– se refiere al abundante número de matrimonios religiosos que se celebran en el país, especialmente de parejas que provienen de Inglaterra, Escocia e Irlanda. En efecto, al parecer muchos prefieren casarse en Chipre por la simple razón de que para ellos es más conveniente. Finalmente, el P. Barato ha hecho notar que la mayor preocupación en materia de pastoral del turismo es ofrecer la posibilidad de asistir a la celebración de la Santa Misa, por lo general en inglés y, con cierta frecuencia, dar la oportunidad de confesarse.

El Revdo. P. Ilija Jakovljevič, ha presentado el informe redactado por el P. Marijan Jelenič, Director nacional para la pastoral del turismo en Croacia, país que cuenta con una gran afluencia turística, sobre todo en los tres meses veraniegos. Durante este período, en efecto, casi 10 millones de turistas se suman a los 4,5 millones de habitantes, con la consiguiente necesidad de nuevas inversiones para modernizar el sector. Con ocasión de la Eucaristía dominical, la Iglesia ofrece a los visitadores por lo menos un saludo en varias lenguas. En muchas iglesias se expone también un afiche de bienvenida así como la prensa católica. Al comienzo de la estación, se difunde un “mensaje cristiano” relacionado con la presencia de los visitadores. La Iglesia, cada vez más consciente de que es importante hacer más por la evangelización en este sector, descubre la necesidad de preparar textos con informaciones histórico-religiosas, o impresos especiales para las diferentes religiones, sobre los Santos locales, las costumbres cristianas, las relaciones con la Iglesia universal. Se advierte también la exigencia de formar guías turísticos para ofrecer a los huéspedes una “bienvenida” espiritual, de la que el hombre contemporáneo tiene mucha necesidad, incluso cuando no lo deje notar en forma evidente. 

El Revmo. P. Joseph Roduit, Abad de la Abadía de Saint Maurice, en la Suiza romanda, ha presentado un informe sobre la pastoral del turismo y el tiempo libre en esa parte de su país, por preparado el canónigo Michel-Ambroise Rey. La Conferencia Episcopal ha confiado a las Abadías de Einsiedeln y de Saint-Maurice la responsabilidad de dicha pastoral, la primera para la Suiza alemana y el Cantón Ticino, y la segunda para la Suiza romanda. El Abad Roduit ha dicho que las montañas y los lagos del país atraen a los turistas sobre todo durante el verano y el invierno. Por tanto, se realiza un particular esfuerzo en las diócesis romandas para dar el valor correcto a esta pastoral específica y para favorecer la acogida de los visitadores en los edificios religiosos, tanto católicos como reformados. 

Asimismo, el P. Roduit ha subrayado que existe la preocupación de armonizar los acercamientos pastorales, sensibilizar a las comunidades de partida, crecer en el intercambio recíproco, en la hospitalidad, en la escucha, con encuentros parroquiales y visitas organizadas. Durante las concelebraciones eucarísticas, se saluda a los participantes en diferentes idiomas. Hay cierta emulación –ha concluido– entre las parroquias turísticas y se trata de promover encuentros entre los varios protagonistas de la vida turística.

El Revdo. P. Stefan Roth, Presidente de la Comisión para el turismo, el tiempo libre y las peregrinaciones de la Suiza alemana y el Cantón Ticino ha proporcionado informaciones sobre los contenidos del sitio Internet, creado para sensibilizar religiosamente a los agentes de pastoral y a los huéspedes. A los Agentes el sitio ofrece los textos litúrgicos para la misa dominical, así como algunos datos sobre cuestiones relacionadas con el turismo, documentos oficiales de la Iglesia y sugerencias para la pastoral. Los huéspedes, en cambio, pueden encontrar allí indicaciones sobre los lugares de peregrinación más visitados, informaciones sobre los horarios de las misas, sobre el patrimonio cultural y la Iglesia en Suiza.

Además, en algunas regiones del país la Comisión organiza cursos para los profesores de esquí y los guías de montaña. Actualmente, un grupo de estudio está elaborando un proyecto para favorecer la colaboración entre la Iglesia y el sector del turismo, con la certeza de que ella puede ofrecer mucho en el plano cultural y espiritual. Asimismo, se está llevando a cabo una colaboración con la Iglesia reformada evangélica para predisponer la acogida eclesial con ocasión de los campeonatos europeos de fútbol del 2008 en Suiza. Se quiere animar también a las parroquias de las ciudades en las que desarrollarán los partidos para la creación de puntos de encuentro entre personas de lenguas y culturas diferentes.

Seguidamente, los participantes se han reunido en grupos de estudio para reflexionar sobre dos argumentos. El primero de ellos estaba formulado como sigue: “Formación moral y profesional de quienes trabajan con diferente título en el turismo. Posibilidades que existen para instituir cursos en las Universidades católicas y pontificias, así como también en los centros de formación para sacerdotes y religiosos. Conocer ante todo donde se está presente y luego interesar a quien corresponde”. El segundo tema era: “En nuestras realidades eclesiales, de hecho ‘transversalesÂ’, ¿cómo responder al fenómeno del turismo, que también lo es? (en efecto, concierne varios ámbitos e influye en varios sectores de la vida). ¿Cómo ayudar a las iglesias locales que reciben a los turistas, pero no cuentan con suficiente clero, medios, etc.?”.

Durante la tarde, han intervenido algunos representantes de los Dicasterios de la Curia Romana. 

El Revdo. Mons. Barnabé Nguyen Van Phuong, Jefe de Oficina en la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, ha afrontado el tema del Turismo como ocasión de evangelización, haciendo notar que mientras en los siglos pasados los misioneros partían de Europa para predicar el Evangelio en otros continentes, gente de otros continentes viene hoy a Europa, a Roma, para escuchar al Papa, visitar los monumentos, las basílicas, los santuarios cristianos. Con relación a este nuevo fenómeno, el cristiano se interroga, en conciencia, sobre cómo aprovechar la ocasión que se le ofrece para dar testimonio de Jesucristo, para anunciar su Evangelio a los hermanos no cristianos. La palabra de San Pablo “Pobre de mí si no predicase el Evangelio” (1Co 9,16), debería constituir un llamado urgente para despertar la conciencia misionera.

Concretamente, se pueden identificar dos campos de acción: 1) en Europa, donde se acogen a turistas europeos y no europeos, cristianos y no cristianos, necesitamos testimonios fuertes, tanto de parte de los individuos, como de parte de las comunidades cristianas. Se anima, pues, a una estrecha colaboración entre las Iglesias locales y las agencias de viaje y los guías turísticos, a fin de que el turismo se convierta en una buena ocasión para la evangelización. Las audiencias pontificias constituyen una oportunidad especial para la catequesis. Sería oportuno examinar la posibilidad de ofrecer a los turistas que no conocen el italiano, una traducción simultánea de la catequesis del Papa, quizás mediante una pequeña radio. 2) En otros continentes hacia los cuales van los turistas europeos, el que viaja debería estar movido por el deseo de encontrar a los demás, de llevar la paz y también el Evangelio, recordando que desde el inicio del Cristianismo, los viajes han permitido y facilitado la difusión de la Buena Nueva en todas partes del mundo. Por tanto, el turismo puede ser hoy un terreno fértil para la evangelización, con metodologías que es preciso encontrar.

El Revdo. Mons. Stefano Sanchirico, representante de la Congregación para la Educación católica, de los Seminarios y de los Institutos de Estudio, ha considerado oportuno subrayar en materia turístico-pastoral la importancia de la formación bajo tres aspectos. En primer lugar, dando espacio a la investigación, al entendimiento y al estudio del fenómeno turístico, con sus implicancias en el plano sociológico, moral, etc. Esta es la tarea primaria de los Centros de estudio y en particular de la Universidad. En segundo lugar, existe la necesidad de una preparación del Clero y de los Agentes del sector, que involucre a los Seminarios y a las Universidades. Se debe poner particular atención en la formación escolar en las escuelas católicas, que están llamadas a educar en una concepción del tiempo libre y del turismo como momento de crecimiento de la persona humana. Es importante que las instituciones escolares católicas sostengan un turismo en el que las Iglesias locales se encuentran con su historia y riqueza espiritual.

El Revdo. P. Antonio Grappone, representante del Pontificio Consejo para los Laicos, ha referido que su Dicasterio no se ocupa directamente de problemáticas pastorales sectoriales, pero en el ámbito del fenómeno del turismo sigue la formación a la fe de los laicos y la pastoral juvenil. El fenómeno turístico –ha observado– lleva consigo una visión consumista y hedonista extraña a la vida cristiana, que implica tanto a los turistas como a los agentes del sector. Se deduce, pues, la necesidad de reforzar la formación cristiana básica y ofrecer ocasiones de seguimiento espiritual en los lugares de afluencia turística. El Pontificio Consejo para los Laicos ha subrayado muchas veces la necesidad de adoptar instrumentos eficaces para la formación, y ha dedicado también sus tres sesiones plenarias a los sacramentos de la iniciación cristiana.

Con respecto al turismo juvenil, el P. Grappone ha manifestado que sus formas organizadas se dirigen en gran parte hacia las ciudades de arte y prevén la visita a iglesias y otros monumentos importantes. Por esta razón, dado que las explicaciones ofrecidas por los guías de las agencias o por los maestros son más bien historicistas y estetizantes, sería oportuno que las visitas a algunos lugares más importantes fuesen concedidas a guías autorizados por las Diócesis y preparados adecuadamente. En fin, las Jornadas Mundiales de la Juventud se han revelado ser muy positivas para salvaguardar a los jóvenes frente a formas de turismo de carácter espontáneo, a menudo marcado por la difusión de la droga, del alcohol y por una sexualidad irresponsable. 

Mons. Francesco Giovanni Brugnaro, Observador Permanente de la Santa Sede ante la Organización Mundial del Turismo (O.M.T. - UNWTO) ha intervenido sobre el tema Perspectivas éticas de la O.M.T. para el desarrollo del turismo respetuoso de la dignidad del hombre en una justa coparticipación de los bienes de la cultura y de las bellezas de la tierra. El recorrido de crecimiento y difusión del movimiento político, moral y cultural que desea mejorar el turismo parece que en la actualidad gira alrededor del alternarse de los adjetivos sostenible, ético y responsable, que no se deben utilizar en sinonimia, de lo contrario se puede correr el riesgo de confundir planos de valor, de acción y de percepción que no coinciden. En efecto, sostenible remite a consideraciones de naturaleza cuantitativa, de políticas del desarrollo y de mejora económica, de estabilización de los recursos. Ético, hace palanca en la razón y en el factor moral para la justa calidad, para la equidad social y para la humanización como regla para la expansión planetaria del sistema de mercado del turismo. Responsable, remite a la actividad cultural, a la participación de los sujetos del turismo, a la conciencia crítica del riesgo economicista y de desarrollo, y sobre todo recuerda el respeto y la educación de toda persona.

De cualquier modo, el turismo y el tiempo libre deben constituir ocasiones de crecimiento turístico local. Además, la persona humana debe ser considerada como referencia ética y jurídica fundamental. La subsidiaridad, la solidaridad y la proporcionalidad no sólo crean bienestar y beneficios a todos los agentes, sino son una garantía frente a negatividades producidas por el impacto turístico. Para los laicos cristianos es válido el compromiso de liberar el turismo de la mentalidad consumista y de no separar nunca el bien personal del bien común. Se debe superar la óptica hedonista e individualista que anima el turismo mediante la recuperación de la antigua civilización de la acogida: es preciso percibir el turismo, desde cualquier punto de vista, como forma de nueva proximidad del mundo y de la cultura contemporánea.

El Revdo. Mons. Aldo Giordano, Secretario general del Consejo de las Conferencias episcopales de Europa, ha observado que la pastoral del turismo manifiesta algunas preocupaciones de fondo de las Conferencias episcopales europeas: la mutación del papel de las parroquias y del ministerio sacerdotal; la crisis de la familia; el vacío del contenido de los valores. Pero dicha pastoral específica puede leer también hoy signos muy interesantes, es decir: la difusión del turismo gratuito a través de la red; la fiesta de los pueblos con ocasión de los campeonatos mundiales de fútbol; la vacación-turismo vinculada con el voluntariado; la fuerte difusión de la peregrinación. De las preocupaciones y de las nuevas señales se pueden identificar algunos retos de fondo para la pastoral del turismo. Ella puede ser –según Mons. Giordano– un laboratorio de frontera para anunciar un evangelio que corresponda al deseo de las personas y para experimentar la gran ocasión para el mundo actual de la dimensión católica del cristianismo y para profundizar, en fin, la experiencia del diálogo ecuménico e interreligioso, así como para un replanteamiento de la concepción misma del tiempo.

En la segunda jornada de la Reunión se ha proseguido con los informes de los Delegados nacionales.

El Revdo. P. Jacques Turck, Director del Servicio nacional para las cuestiones familiares y sociales en Francia, que ahora se ocupa también de la pastoral del turismo, ha hablado acerca de las Jornadas nacionales, que se han desarrollado en marzo pasado en Anglet y han contado con la participación de cerca de 400 personas. El tema principal fue el de los caminos de evangelización. Al respecto, la reducción de las horas de trabajo en Francia (35 horas por semana) ha comportado una mayor disponibilidad de tiempo libre, que puede ser objeto de propuestas para constituir un tiempo fuerte, ya sea en el plano espiritual como familiar o convivial, con posibilidad de servicio a los demás. 

El P. Turck ha afrontado también el tema de la mundialización, notando que la gran facilidad actual de moverse se debe a la apertura de las fronteras. Al respecto, la Iglesia en Francia quisiera desarrollar una pastoral del encuentro en el tiempo libre, intensificando la atención a los profesionales y a las personas que trabajan en la industria turística. Al mismo tiempo, se quisiera acrecentar el sentido de la acogida. Al mencionar la reforma apenas puesta en marcha por la Conferencia episcopal francesa, el P. Turck ha referido que para favorecer la unión entre el obispo diocesano y las personas comprometidas en la diócesis en este servicio pastoral, ya no existe un Comité episcopal específico. Por otro lado, la revista “Haltes” ha cedido el puesto a un boletín de liaison

El Revdo. P. Nikolaos Roussos, ofm cap., en representación del P. Petros, Director nacional de la pastoral del turismo en Grecia, ha revelado que su país es meta muy visitada durante las vacaciones. Este año se han calculado más de 15 millones de turistas, sobre una población no superior a los 11 millones de habitantes. La Iglesia católica, comprometida desde hace decenios en esta pastoral, considera que hay muchos cambios en este sector. De un turismo netamente “occidental” de hace algunos años, ahora se nota la imponente presencia de los hermanos de Europa del Este, con visitadores ortodoxos y de otras religiones. Debido a esto se han impresos para las iglesias textos del tiempo ordinario de la S. Misa en 8 lenguas (incluido el polaco) y se ofrecen también las lecturas bíblicas en varios idiomas, por medio de folletos dominicales. Los turistas son bien acogidos en las iglesias, donde se busca crear un clima familiar entre los locales y los forasteros, hermanos en la Iglesia católica universal. Lamentablemente, las fuerzas a disposición son escasas con respecto a las exigencias. Además, la emigración ha hecho aumentar el número de los católicos esparcidos en varios lugares, mientras disminuyen los sacerdotes debido al menor número de vocaciones. En esta nueva realidad, hay que ocuparse de un pueblo, muy a menudo pobre de bienes materiales, pero también muy carente en el campo espiritual, en el conocimiento y en la práctica de la fe.

El Revdo. P. Mario Lusek, en representación de Mons. Carlo Mazza, Director de la Oficina Nacional para la pastoral de turismo, tiempo libre y deporte, en Italia, ha puesto de relieve la sintonía de la Oficina Nacional de la CEI con las orientaciones del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes y la recepción de sus recomendaciones. Ha encuadrado luego el trabajo de la pastoral del turismo en Italia en el contexto del documento de los Obispos italianos titulado “Comunicar el Evangelio en un mundo que cambia”. Ha ilustrado también los logros teológico-pastorales fruto de la reflexión puesta en marcha a través de congresos, stage, jornadas de reflexión y seminarios de estudio. El P. Lusek ha mencionado las iniciativas pastorales realizadas y el trabajo promovido y realizado por las Comisiones Regionales y por las Oficinas Diocesanas donde existen y están estructurados. También ha ilustrado el programa de la Oficina Nacional para el próximo año deteniéndose sobre todo en el proyecto de una nueva figura: “el ministro de la acogida” en el turismo. En fin, ha indicado los nuevos cuidados de los que debe hacerse cargo la Oficina Nacional para dilatar cada vez más en el territorio la acción de la Iglesia en el mundo del turismo, en el contexto de una pastoral integrada en una estrategia de red.

La Sra. Rosemarie Rohmer-Strecker, del Centro Nacional de pastoral turística de Luxemburgo, ha comunicado que las actividades pastorales están destinadas tanto al turista que llega como al que parte. Estas dos dinámicas delimitan el campo de acción de las iniciativas de carácter eclesial. La Sra Rohmer-Strecker ha mencionado algunos programas consolidados y nuevos proyectos que han iniciado en el año en curso, en particular la preparación de la Peregrinación del Cristo sonriente, que se realizará en el 2007, año en que Luxemburgo será capital cultural de Europa. De todos modos, es válida la colaboración con las agencias de viaje para organizar itinerarios del espíritu y realizar la bendición de los automovilistas y motociclistas, incentivando así la seguridad en las carreteras, y los conciertos denominados Viajes Musicales. Durante el verano, en la catedral se ponen a disposición de los visitadores áreas destinadas a la información y para los juegos de los niños. Se ha demostrado muy eficaz - ha añadido la Sra. Rohmer-Strecker - la oración de mediodía con textos y música, mientras se aprecia también las visitas guiadas por los estudiantes de ARC (Ars et fides). 

El Revdo. P. Stjepan Kusan, s.j., representante de Macedonia, ha informado a los participantes que su país atrae cada vez más a los turistas extranjeros. La Iglesia local está buscando la forma de organizarse para poder estar también a su servicio. Junto a la actividad pastoral ordinaria, se advierte la necesidad de concentrarse en los problemas que conlleva el fenómeno de la realidad transversal del turismo: encuentro de las culturas, posible abuso de drogas o explotación de mujeres y niños. Permanece la tarea de colaborar con la Iglesia ortodoxa en este campo, y de sensibilizarla a favor de la pastoral del turismo.

S.E. Mons. Edward Janiak, Encargado de la Comisión Episcopal para los migrantes, el turismo y las peregrinaciones, ha referido que en Polonia en cada diócesis hay un sacerdote responsable para la pastoral del turismo, con la coordinación en el ámbito de la Conferencia Episcopal por el Obispo promotor. Entre las iniciativas más importantes, el Obispo ha mencionado los retiros espirituales para los guías turísticos, que anualmente se organizan a escala nacional. Este año, en el retiro de Czestochowa, han participado 850 personas provenientes de toda Polonia. Además, está creciendo el interés de los turistas por esta Nación que ofrece monumentos históricos, centros de peregrinación y lugares de culto donde se manifiesta una profunda cultura cristiana, se da testimonio de una fe viva y de adhesión a la Iglesia católica. Los párrocos de las localidades turísticas han sido invitados a preocuparse de los grupos de extranjeros, mostrando acogida y disponibilidad muy abierta hacia las diferentes costumbres y religiosidades. Se da particular atención también a la dimensión espiritual de las peregrinaciones, que están acompañadas siempre por un sacerdote y se organizan de manera tal que se asegura la celebración cotidiana de la Misa, el rezo del rosario y los cantos religiosos. 

El Revdo. P. Rui Manuel da Silva Pedro, cs, Secretario de la Comisión episcopal para la movilidad humana de Portugal, ha presentado una síntesis de las respuestas a la encuesta sobre la pastoral del turismo entre las diócesis que fue realizada en el 2004, y las conclusiones de un Congreso en Angra, en 2005. 

El turismo en el país ayuda para que creyentes y no creyentes conserven la memoria de los valores y de los símbolos que forman parte de la tradición cristiana del pueblo. En Portugal y en Europa la memoria es uno de los grandes recursos para una nueva evangelización y espiritualidad encarnada en una sociedad secularizada y laicista.

La Iglesia espera lograr, a breve plazo, recursos humanos para “relanzar” esta pastoral a escala nacional, a fin de que exponentes de las diferentes diócesis se puedan encontrar para compartir actividades que algunos ya están desarrollando. Se quisiera una coordinación nacional continua y no sólo vinculada a eventuales acontecimientos internacionales, como por ejemplo el Jubileo del 2000, Expo Â’98 y Euro 2004. El punto de partida para este espíritu transversal, hecho posible por el turismo, será un Encuentro Pastoral Nacional en el 2007.

Entre las numerosas propuestas, está la de ofrecer informaciones y una parte de la Liturgia en varias lenguas durante las celebraciones parroquiales, en las que participan grupos consistentes de turistas, así como la de servirse del curso en Internet “Turismo y Patrimonio Religioso” de la Facultad de Teología y del Instituto de Enseñanza y Formación a Distancia, promovido por la Universidad Católica Portuguesa.

El Revdo. P. Sebastián Taltavull, Director del Secretariado de la Comisión episcopal de pastoral, en España, ha explicado que dicha Comisión tiene como tarea esencial precisamente obrar en el ámbito pastoral. Cada año ella dedica su atención a una temática de interés común en el campo de la pastoral global, a través de la reflexión sobre los principios doctrinales que la iluminan, identificando algunas líneas de acción, y dejando a cada una de las diócesis las respectivas decisiones operativas. Para este fin, invita anualmente a los Vicarios generales y a los Vicarios de pastoral a reunirse en las llamadas “Jornadas” (en realidad se trata de tres días). 

El carácter de pastoral global y transversal de su obrar permite a la Comisión en acto ser como ‘puenteÂ’ con las demás Comisiones episcopales específicas en su expresión de pastoral práctica. En este sentido, además de su trabajo de base, que es la coordinación de los Vicarios de pastoral y, partiendo de ellos, el servicio a sus respectivas Iglesias particulares, la Comisión tiene, entre otras responsabilidades, la coordinación de tres Departamentos de pastoral específica: la pastoral de la salud, de los no oyentes, y del turismo, santuarios y peregrinaciones. Con los respectivos Directores de estos tres Departamentos se lleva adelante un trabajo de grupo y se organizan conjuntamente todas las actividades programadas. La experiencia de comunión que todo esto comporta está ayudando a proyectar nuevas acciones en ámbito común en el campo de la evangelización que los varios sectores pastorales requieren y de los cuales tienen necesidad.

El Revdo. P. Josep-Enric Parellada, osb Director del Departamento de turismo, santuarios y peregrinaciones de la Conferencia episcopal de España, ha manifestado que en su país la realidad del turismo, interno y extranjero, es variada y compleja. Además, teniendo en cuenta los datos estadísticos del 2005, se ha visto que el turismo se ha convertido en la primera actividad industrial del país, con un aumento del número de los turistas internacionales y de las entradas que producen. Se ha registrado también un incremento del turismo interno.

Los nuevos responsables del Departamento, que fueron nombrados hace cerca de un año, han efectuado un estudio sobre el status quaestionis de la pastoral del turismo en las diócesis del país. Como consecuencia, se ha hecho un programa de actividades para el próximo bienio, para responder a las nuevas necesidades y prioridades que surgen. De acuerdo con esto, se ha convenido promover encuentros regionales (por áreas parecidas o por provincias eclesiásticas, por autonomías...) con el objetivo de ocuparse de las situaciones humanas y pastorales concretas de visitadores, profesionales turísticos y agentes de pastoral; se han confirmado también las “Jornadas” nacionales de esta pastoral, que iniciaron en 1964. El aumento creciente de los españoles que se dirigen al exterior por vacaciones, paseo o turismo, muestra la oportunidad para predisponer su preparación y dar espacio en este tiempo incluso a la experiencia religiosa.

Poco a poco se están realizando en España las recomendaciones formuladas en el VI Congreso Mundial de Pastoral del Turismo (Bangkok, Thailandia, 2004).

A continuación, los participantes se han reunido por grupos de estudio para reflexionar sobre dos temas. El primero era referente a la circulación de las informaciones. La pregunta era: “¿Hay sitios web en varios países que reflejan el espíritu pastoral para los turistas y revelan la identidad cristiana? ¿Pueden ser instrumentos útiles para hacer circular mejor, por lo menos en ámbito europeo, las informaciones sobre la actividad pastoral desarrollada en cada uno de los países, habida cuenta de la importancia de las experiencias de todos? Realidades y perspectivas”. El segundo tema se refería a la solicitud de eventuales propuestas al Pontificio Consejo especialmente sobre la Pastoral del Turismo en general, sobre el Boletín informativo del Dicasterio y lo concerniente al próximo VII Congreso Mundial.

Durante la tarde han proseguido las intervenciones de parte de los representantes de los Dicasterios de la Curia Romana.

El Revdo. Mons. Johan Bonny, representante del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los cristianos, ha hablado de la posibilidad de favorecer la colaboración entre las Iglesias y las Comunidades eclesiales en el ámbito de la pastoral del turismo en Europa. Ha agradecido por todo lo que se ha hecho para animar la cooperación y el intercambio ecuménico en el campo del turismo, poniendo algunos ejemplos, como las grandes capitales y ciudades europeas que han hecho que las catedrales, las iglesias y los santuarios sean más acogedores con sus fieles y con los miembros de otras tradiciones cristianas. También ha mencionado un sitio Internet creado para ayudar a los fieles del lugar y para los numerosos turistas a fin de que encuentren un punto de asistencia pastoral o de celebración litúrgica según su pertenencia eclesial. Mons. Bonny ha observado que “el acercamiento ecuménico en el ámbito del turismo a menudo se manifiesta como fruto de una feliz colaboración entre dos mundos: el de los responsables de las Iglesias y Comunidades cristianas y el de los responsables políticos o agentes organizadores en la esfera cultural o turística”. El acercamiento ecuménico que estimula a tomar iniciativas comunes y a ofrecer un testimonio común – ha dicho – no puede dejar de ayudar a las comunidades cristianas y valorar juntos el patrimonio común y hacerlas conocer al “mundo transversal” del turismo.

Hablando luego sobre la ayuda que se debe ofrecer a los turistas para que comprendan mejor la realidad particular que la tradición cristiana les ofrece ver y contemplar, Mons. Bonny ha mencionado la posibilidad de una formación “ecuménica” de los guías y de otros agentes que trabajan en campo turístico. En efecto, muchos cristianos tienen la oportunidad de ser ecuménicos durante sus viajes. De todos modos, su Dicasterio pronto publicará una pequeña “guía práctica del ecumenismo espiritual”. La guía ofrecerá sugerencias útiles para promover precisamente el ecumenismo espiritual en los santuarios y peregrinaciones, pero podría aplicarse también al mundo “transversal” del turismo, sobre todo en un contexto europeo.

El Revdo. P. Theodore Mascarenhas, representante del Pontificio Consejo para la Cultura ha recordado en primer lugar la narración de la creación en el Libro del Génesis, cuando Dios creó toda cosa y vio que era “buena” o “bella”. La belleza de Dios en la naturaleza, su manifestación en las culturas y en el trabajo artístico del hombre se vuelve así la base y el fundamento del turismo. Durante la pasada Sesión Plenaria, el Pontificio Consejo para la Cultura discutió detalladamente sobre como la via Pulchritudinis, o “Vía de la Belleza”, puede ser instrumento de evangelización de las culturas, de inculturación de la fe y de diálogo con los no-creyentes. Para los que se ocupan de la pastoral del turismo en Europa, mientras las culturas en evolución y la globalización representan retos arduos, los tesoros tradicionales y culturales son una oportunidad tanto para un verdadero diálogo entre culturas como para el empleo de la via Pulchritudinis para llevar la humanidad a Dios. Según las palabras del Santo Padre Benedicto XVI, “el turismo puede propiciar un auténtico desarrollo humano y social gracias a la creciente oportunidad que ofrece de bienes compartidos, de fecundos intercambios culturales, de acercamiento a bellezas naturales y artísticas, de confrontación entre mentalidad, tradiciones y religiones diversas” (Angelo Sodano S.E. Card., Mensaje en nombre del Santo Padre con ocasión de la XXVII Jornada Mundial de Turismo, 8.09.2006). Por tanto, se deberían adoptar medidas prácticas para que el turismo se convierta en instrumento para la evangelización de las culturas y para el diálogo intercultural. 

El Revdo. Mons. Fabrizio Capanni, Jefe de Oficina en la Pontificia Comisión para los Bienes Culturales de la Iglesia, ha hecho notar que el turismo religioso y las peregrinaciones constituyen hoy una ocasión pastoral preciosa para alcanzar un número de personas más amplio de aquel que normalmente asiste al culto en las iglesias. Refiriéndose de manera “natural” a la dimensión del espíritu, el arte es un instrumento para que personas que no tienen fe o están en búsqueda puedan interesarse de temas religiosos. El arte sagrado siempre ha sido un medio excelente de catequesis, de evangelización y de diálogo. Los agentes turísticos de interés religioso, deberán insertar la valoración del arte sagrado en el plan pastoral que acompaña la organización de los viajes y de las peregrinaciones y la acogida de turistas y peregrinos. Los santuarios son también un lugar privilegiado donde se puede actuar correctamente la reforma litúrgica y realizar el encuentro entre Iglesia y artistas.

El Sr. Angelo d’Andrea, responsable de la “Oficina Informaciones Peregrinos y Turistas”, del Gobernatorado para la Ciudad del Vaticano, ha hablado sobre la actividad de su servicio.

La misión principal de la Oficina, que tiene como objetivo asistir a los visitadores y satisfacer sus solicitudes de informaciones de carácter turístico y religioso, ha tenido últimamente una evolución para responder al número creciente de los visitadores. En efecto, son cerca de 1,000 las personas que diariamente transitan por la Oficina, en gran parte pertenecen al cada vez más consistente número de fieles que salen después de haber visitado la Basílica de San Pedro. La Oficina, que dispone de un sistema informatizado constantemente actualizado, favorece también la actividad de los voluntarios, que desarrollan la función de guías para los grupos de fieles que tienen interés de efectuar visitas gratuitas a la Basílica de San Pedro, concediéndoles el empleo de los locales para organizar las citas. 

El servicio de voluntariado se efectúa en el arco del año con cadencia casi diaria (domingos excluidos) en las primeras horas de la tarde. Anualmente se organizan más de 300 visitas por un total de 3,000 participantes.

El Revdo. Mons. Pier Gaetano Lugano, Director de la Oficina para la pastoral del tiempo libre, turismo y deporte del Vicariato, ha dado la bienvenida en nombre de la Diócesis de Roma a todos los participantes. Presentando las actividades y las experiencias de esta Iglesia, ha explicado que en el ámbito del turismo religioso la Diócesis se sirve de la Obra Romana Peregrinaciones. Cumpliendo un deseo del Congreso de Bangkok, ésta se propone “contribuir en el encuentro entre Naciones y culturas”, tratando de que el contacto entre las poblaciones locales y las comunidades cristianas constituya un momento significativo del viaje. Asimismo, ha hecho algunos ejemplos de proyectos realizados: viajes a Tierra Santa, promovidos por la mencionada Obra en todas las Diócesis de Italia, al “Maratón de la paz” para los deportivos, y la reciente peregrinación de la reconciliación en Líbano, Jordania e Israel. La Oficina está tratando de ocuparse también en forma regular de la formación espiritual de los directores de hoteles y agentes de turismo. Además, se sigue promoviendo la difusión del Evangelio interconfesional en los hoteles. Se ha indicado oportunamente en las varias lenguas las celebraciones de la Santa Misa dominical.

En colaboración con la Región, la Provincia y la Municipalidad, se han valorado y puesto en función antiguos recorridos de peregrinación de toda Europa hacia Roma. Se han estudiado dos trayectos de open bus “Roma Cristiana” para ofrecer una visión temática de Roma, bajo el perfil religioso, artístico, cultural y sociológico. En colaboración con Alitalia y Trenitalia, en cambio, se organizan estadías para participar en la Audiencia pontificia o el Ángelus, para visitar las basílicas y las tumbas de los papas, o llegar a las principales metas de visita y peregrinación. Se desea restituir al turismo su naturaleza como momento de encuentro, de diálogo, de confrontación y de respeto hacia el que es diverso de nosotros.

Al término de la segunda jornada de Reunión, los participantes han aprobado las siguientes conclusiones y recomendaciones.

 

II. Conclusiones 

1) Todos los participantes en la Reunión son conscientes de que el anuncio de Jesucristo, el Señor, es el centro de toda pastoral, también de aquella del turismo, y de que toda su acción tiene como objeto-sujeto la persona humana. En continuidad con las indicaciones expresadas en las recomendaciones del Congreso mundial de Bangkok de 2004, dicha acción ha de ser creativa y realizada con ingenio pastoral.

2) El mismo turismo, realidad compleja y “signo de los tiempos”, requiere una nueva, si no una primera evangelización, en quienes participan de distintos modos en ella, también debido a las nuevas formas con que se presenta hoy: escolar, congresual, sanitario, social, “misionero”, deportivo, de grandes eventos (jornadas mundiales de la juventud, acontecimientos deportivos, musicales,...).

3) Las Conferencias episcopales representadas en el Encuentro tienen el deseo de profundizar en la realidad humana del fenómeno turístico, que abarca tantos aspectos de la vida pastoral, por ser transversal, y porque incluye muchos ámbitos de la sociedad y de la misma Iglesia. Es preciso, sin embargo, tener presente que existen distintos modos de enfocar la pastoral del turismo en las Iglesias de Europa del Este y del Oeste.

4) Se ha constatado que, desafortunadamente, subsiste aún una percepción restrictiva del turismo, pues se relaciona sólo con los negocios y el bienestar, lo que dificulta una aceptación adecuada y un desarrollo necesario de la actividad pastoral en el sector.

5) Parece útil, donde todavía no existe, la creación de una estructura nacional capaz de coordinar lo que ya hacen muchas diócesis, para racionalizar y dar eficacia e importancia a la acción de la Iglesia.

6) En la sociedad europea secularizada y siempre más intercultural y multirreligiosa, el turismo puede llegar a ser un instrumento útil para divulgar los valores evangélicos (y dar a conocer los símbolos característicos de las raíces cristianas del continente), es decir, capaz de construir una sociedad más humana y pacífica. Incluso una visita turística bien dirigida, a las obras de arte y a los lugares históricos de la memoria, puede ser, de hecho, una catequesis natural.

7) Se hace prioritaria la necesidad de un proyecto de formación, incluso desde una perspectiva ecuménica y atenta a la dimensión religiosa, capaz de interactuar, en una especie de alianza, con los distintos sujetos interesados por el mundo del turismo (eclesiales, profesionales, institucionales, educativos, universitarios, empresariales,...), ofreciéndoles a todos nuestra experiencia.

8) Este carácter transversal de la acción puede llegar a ser una prueba de resistencia para la evangelización, pero también un testimonio de apertura, acogida, comunión y diálogo, tanto en el interior mismo de la comunidad eclesial, como en la relación Iglesia-mundo, a la luz de los textos del Concilio Ecuménico Vaticano II (Gaudium et spes).

9) De hecho, la acción de la Iglesia en el mundo del turismo, y su respeto por el carácter transversal, tiene varias correlaciones (por ej., entre distintos sujetos eclesiales, en el diálogo ecuménico, en el encuentro con las religiones) y se resume y traduce en la “acogida”. Esta última no consiste en un simple ofrecimiento de datos o noticias, sino en un estilo de colaboración, de encuentro, de entendimiento, capaz de derrumbar muros y empalizadas, y de construir puentes de solidaridad y de paz.

10) El carácter transversal del turismo revela la necesidad de encontrar un vínculo que permita darle un valor antropológico y moral, y también una dimensión universal, beneficiándose del Magisterio eclesial.

11) Los agentes y empresarios cristianos del turismo tienen una inmensa tarea por desarrollar, teniendo en cuenta su carácter transversal, para evitar que se salga del “cauce”, produzca negatividad en los sujetos nuevos o más débiles, o comprometa y siembre injusticia en una perspectiva de crecimiento.

12) Una mención y una atención particular merecen las peregrinaciones, sobre todo hacia metas que han contribuido a dar un rostro a Europa: el camino de Santiago, la vía Francígena, la red de los santuarios, los itinerarios de arte y de fe, en un continente tan rico de testimonios de sus raíces cristianas.

13) Una atención pastoral especial, con sus formas originales, merecen los trabajadores del sector turístico, absorbidos por su trabajo durante toda la alta temporada. Dichas formas de pastoral deben poner de relieve la solicitud de la Iglesia hacia ellos. 

14) Desde la perspectiva de una estrategia pastoral de red o, mejor dicho, integrada, la pastoral del turismo encuentra en las comunidades eclesiales, y sobre todo en las parroquias, por su amplia presencia en el territorio, los sujetos de referencia y de síntesis. 

 

III. Recomendaciones 

15) Promuévanse las colaboraciones con las entidades civiles en los distintos niveles (Organismos internacionales, Comisión Europea, Gobiernos, Regiones, Municipios), en nombre de la importancia clave del hombre, teniendo presente que el turismo influye transversalmente en la cultura, la economía, la ecología, los estilos y la calidad de la vida de las personas, etc.

16) Habrá que fomentar, con otros sujetos eclesiales (centros misioneros, de pastoral juvenil, de la familia, de ancianos, de jubilados, de voluntariado), de modo transversal y con un espíritu de comunión, formas originales de turismo con un “rostro nuevo”: turismo gratuito; viajes a bajo costo; turismo en los países de misión; vacaciones de servicio en los países pobres; turismo ecológico; recorridos del silencio; hospitalidad en los monasterios o en los centros de oración.

17) Habrá que adaptar la realidad de la pastoral del turismo a la evolución de la sociedad y de la tecnología, con la creación, por ej., de un Observatorio interdisciplinario para un turismo de calidad (atento a todas las categorías sociales), formado por teólogos, sociólogos, juristas, economistas, agentes de pastoral, especialistas y técnicos, en comunión con los Pastores de la Iglesia.

18) Habrá que crear sinergias con las instituciones, en todos los niveles, para que la obra pastoral se realice en favor de todas las personas que viven del turismo o lo sufren.

19) Ante la realidad europea, marcada cada vez más por la movilidad de las personas, la misión de los sacerdotes y de otros agentes de pastoral debe ser siempre más cualificada, para adaptarse a una característica imposible de detener, que transforma las comunidades parroquiales, antes estables, en “lugares privilegiados de paso y de encuentro limitado en el tiempo”.

20) Estúdiese la posibilidad de caminos de formación para sujetos eclesiales en los planes de pastoral de las Iglesias locales, en los programas de los Seminarios, en una clave interdisciplinaria, y por lo tanto transversal, verificando con las Universidades católicas y estatales, con las Facultades teológicas y los Institutos de formación, así como con los Centros de investigación, la posibilidad de cursos, masters y seminarios de estudio sobre el turismo y su pastoral.

21) Se hace, por lo tanto, indispensable el estudio de los idiomas en la formación inicial, ojalá con stages en el exterior, con el fin de garantizar una “multifuncionalidad” de los futuros sacerdotes, en un ámbito siempre más intercultural.

22) En medio de la inquietud del hombre moderno, atemorizado por las calamidades naturales (calentamiento global, tsunami,...), es urgente que la Iglesia haga conocer su teología de la creación como base sólida para respetar y proteger, además de valorizar y apreciar, las bellezas y el orden del universo.

23) Será importante establecer mayores sinergiascon las asociaciones profesionales (hoteleros, responsables, guías, agentes de turismo, trabajadores del sector, incluso estaciónales,...) para realizar acuerdos comunes con miras a la promoción de un turismo de calidad.

24) En la pastoral del turismo, tanto en la acogida a los visitantes como en la preparación de los fieles al viaje, habrá que señalar también las injusticias respecto a los que son explotados y experimentan la violación de sus propios derechos, como es el caso de los trabajadores sin protección, de las mujeres, y sobre todo de los menores.

25) La formación de guías o acompañantes debe contemplar, igualmente, la posibilidad de presentar el cristianismo a los turistas que no creen en Cristo.

26) Habría que enfocar mejor el arte de viajar, y además de poner atención a su dimensión de recreo y a su aspecto lúdico, considerar también aquella más sabia de investigación, descubrimiento, curiosidad cultural, en la que el turista puede experimentar una especie de espiritualidad del tiempo libre.

27) El turismo es una posibilidad que se ofrece para reflexionar sobre la realidad del tiempo y animar a los cristianos que están de vacaciones a conciliar el tiempo de descanso con la riqueza de la celebración religiosa, sin limitarla a la Misa del domingo.

28) Por lo que se refiere a la problemática planteada por los matrimonios celebrados en localidades turísticas, es tarea de los Obispos locales darle una respuesta collatis consiliis con los Obispos de los territorios de procedencia de los turistas.

29) Es deseable la creación de un website a nivel europeo, centrado pastoralmente, al que todos puedan acceder y también contribuir. Son importantes las palabras claves: “pastoral” y “turismo”, para acceder más fácilmente. Se ha sugerido comenzar a nivel nacional.

30) Por lo que se refiere a la pastoral del turismo en la ciudad de Roma, eje de la cristiandad, en colaboración también con las autoridades competentes de la Santa Sede, algunos estiman necesario para los peregrinos que participan en la Audiencia del Papa, la posibilidad de lugares de asistencia organizados para las celebraciones eucarísticas de carácter “internacional”.

Además, con el objeto de que todos los peregrinos puedan comprender inmediatamente en su propio idioma las palabras del Santo Padre, se ha propuesto la utilización de material apropiado (pantallas gigantes con el texto en distintos idiomas, radios portátiles,...).

31) Debido a las dificultades de algunas Iglesias locales, por la gran afluencia de turistas durante la alta estación y la falta de sacerdotes, se desea que las Conferencias episcopales de Europa dotadas de personal y medios más numerosos, manifiesten su solidaridad para que no falte la asistencia de sacerdotes en la temporada de vacaciones. Ellos podrían proporcionar así un útil servicio pastoral, combinándolo con el necesario descanso.

32) Es deseable, en la medida de lo posible, la participación del Pontificio Consejo en acontecimientos vinculados a la pastoral del turismo promovidos por las Conferencias episcopales de los distintos países. 

 

Ciudad del Vaticano, 21 de Noviembre de 2006

 

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