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 Pontifical Council for the Pastoral Care of Migrants and Itinerant People

People on the Move

N° 110, August 2009

 

 

 

Mensaje a los participantes DEL

V Foro Europeo de Turismo Social*

 

Al celebrarse en la ciudad de Málaga (España) el V Foro Europeo de Turismo Social, del 15 al 17 de octubre del presente, bajo el título El turismo social y la crisis: impactos y oportunidades, me es grato poder enviarles mis mejores votos por el éxito de este evento.

Nuestro saludo a todos los presentes y nuestro sincero agradecimiento a quienes han hecho posible la realización de este Foro, en particular al BITS (Bureau International du Tourisme Social), organizador del encuentro, en la persona de su Presidente, el Doctor Norberto Tonini. Nuestro reconocimiento a la Comisión Europea, al Gobierno de España y a la Junta de Andalucía, que en esta ocasión han sumado sus esfuerzos.

A lo largo de su historia reciente, la Santa Sede ha querido acompañar e iluminar con la sabiduría del Evangelio el importante fenómeno social que supone el turismo. Esta afirmación bien podría ser sostenida con numerosos ejemplos, tales como las competencias turísticas asignadas a este Pontificio Consejo, la presencia en el seno de la Organización Mundial del Turismo o la publicación de documentos sobre este fenómeno. Este año, de hecho, se cumple el 40 aniversario de la publicación del Directorio General para la Pastoral del Turismo Peregrinans in terra, primer documento sistemático referido a la pastoral del turismo, que alentó la valoración positiva de la Iglesia sobre este creciente fenómeno, y supuso una invitación a acompañarlo espiritualmente y a evangelizarlo. Sus proféticas reflexiones, debidamente desarrolladas, fueron posteriormente retomadas en las Orientaciones para la pastoral del turismo, publicadas por nuestro Pontificio Consejo en el 2001.

En todos los documentos eclesiales ciertamente se constata que el turismo, en cuanto fenómeno humano, es una realidad poliédrica y trasversal. Por ello se hace emerger con franqueza algunos elementos ambiguos o negativos, pero también, y especialmente, numerosos rasgos positivos. Así, junto al término “turismo” encontramos vocablos tales como: descanso; restauración física y espiritual; vía para el recíproco conocimiento de personas, pueblos y culturas; recurso de fraternidad; instrumento privilegiado para reforzar y multiplicar la paz, el diálogo y la armonía entre civilizaciones; factor de tolerancia; ocupación laboral; desarrollo económico; lucha contra la pobreza; medio para el desarrollo y la cooperación internacional; factor de creciente solidaridad socio-económica; espacio de creatividad; forma de autoeducación; ocasión de crecimiento humano; instrumento para el conocimiento y la protección del patrimonio histórico-cultural; ámbito de contemplación; plataforma de crecimiento espiritual; tiempo de escucha y de meditación; ocasión de encuentro con la naturaleza; actividad para la protección del medio ambiente; etc.

Si esto es así, si el turismo puede verse adornado por estas características positivas, debemos concluir que ciertamente éste es una oportunidad, es más, un derecho para todos los pueblos y para todos los hombres y mujeres que los integran, y que no puede ser restringido a unas reducidas franjas sociales. Y es que el turismo en particular y el tiempo libre en general es una “exigencia de la naturaleza humana, que representa en sí mismo un valor irrenunciable”.[1] Pero la constatación de la realidad nos muestra que no está al alcance de todos y que son todavía muchos los que no pueden aprovecharse de sus beneficios.[2]

Por ello, la Iglesia valora positivamente todos los esfuerzos que se realicen a favor de un turismo social, nombre bajo el cual “numerosas asociaciones vienen trabajando para hacer del turismo algo accesible a todos, bien a través de sistemas que ayudan a las personas y a las familias a su financiación, bien mediante la planificación y desarrollo de determinadas actividades turísticas”.[3] Pero en una situación de crisis económica, como la que estamos sufriendo, son las políticas sociales las que en no pocas ocasiones experimentan un mayor recorte de fondos. Y aquí ciertamente se pone en riesgo la ejecución de los programas de turismo social.

Como ayuda tanto al trabajo ordinario como a la reflexión de este Foro quisiéramos ofrecer el documento que, en forma de encíclica y bajo el título Caritas in veritate,[4] el Papa Benedicto XVI publicó el pasado mes de junio. Queremos subrayar el hecho de que siendo un texto de doctrina social dedicado al desarrollo humano integral, hay un número que aborda el complejo y rico fenómeno del turismo (cfr. n. 61). Es más, todo el texto en su conjunto ofrece numerosas pistas acertadas para la reflexión y pautas útiles para nuestra acción.

Una de las propuestas importantes que ofrece el Santo Padre es la invitación a superar una obsoleta dicotomía entre la esfera de lo económico y la esfera de lo social, que ha llevado a identificar erróneamente la economía con la producción de riqueza y lo social con el lugar de la solidaridad.[5] La encíclica en cuestión invita a superar esta identificación, indicando que una actuación económica que no incorpore en sí la dimensión social no sería éticamente aceptable, al tiempo que cualquier acción social que no tenga cuenta de los recursos resultaría a largo plazo insostenible. La doctrina social de la Iglesia nos recuerda “que una buena sociedad ciertamente es fruto del mercado y de la libertad, pero que existen exigencias, atribuibles al principio de fraternidad, que no se pueden eludir ni remitir únicamente al ámbito privado o a la filantropía”.[6] Al Santo Padre le interesa subrayar, incluso en el ámbito económico, el principio de fraternidad sobre el de solidaridad, así como el principio de la gratuidad y la experiencia del don, que llevan a perfección el precepto de la justicia. De este modo, los gastos sociales pasarían a ser considerados una inversión social, más que un consumo social, convirtiéndose así en factor de desarrollo económico.

Estoy seguro de que en este profundo y lúcido documento de Benedicto XVI, más allá de las diferentes convicciones personales y sensibilidades, se puede hallar una profunda inspiración en el cumplimiento de la tarea asumida, que permita responder acertadamente a los actuales desafíos.

Y en este camino se confirma la voluntad de la Iglesia de unir su contribución específica a los esfuerzos de las instituciones y asociaciones civiles que se dedican al turismo social, el cual, y con palabras de Benedicto XVI dirigidas, entre otros, al BITS, “constituye un motivo de esperanza en un mundo en el que se han acentuado las distancias entre quienes tienen todo y los que sufren hambre, carestía y sequía”.[7] Así con nuestra presencia queremos dar “testimonio de la particular predilección de Dios hacia los más humildes”.[8] 

Ciudad del Vaticano, 12 de octubre de 2009         

 

 

X Antonio Maria Vegliò

Presidente

 

 

X Agostino Marchetto

 Secretario


 

* Málaga, España, 15-17 de octubre de 2009.

 

 

[1] Pontificio Consejo para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes, Orientaciones para la Pastoral del Turismo, 29 junio 2001, n. 6: Suplemento a LÂ’Osservatore Romano, n. 157 (42.795), 12 julio 2001.

[2] Cfr. Ibidem, n. 24.

[3] Ibidem.

[4] Benedicto XVI, Carta encíclica Caritas in veritate sobre el desarrollo humano integral en la caridad y en la verdad, 29 junio 2009: Suplemento a LÂ’Osservatore Romano, n. 154 (45.197), 8 julio 2009.

[5] Cfr. Ibidem, nn. 35-42.

[6] Cardenal Tarsicio Bertone, Discurso sobre la “Caritas in veritate” al Senado de Italia, 28 julio 2009: http://www.vatican.va/roman_curia/secretariat_state/card-bertone/2009/ documents/rc_seg-st_20090728_visita-senato_sp.html.

[7] Benedicto XVI, Discurso a los participantes en un encuentro organizado por el Centro Turístico Juvenil y la Oficina Internacional del Turismo Social, 27 septiembre 2008: LÂ’Osservatore Romano, n. 227 (44.967), 28 septiembre 2008, p. 1.

[8] Pontificio Consejo para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes, Orientaciones para la Pastoral del Turismo, 29 junio 2001, n. 24.

 

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