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COMISIÓN PARA LAS RELACIONES RELIGIOSAS CON EL ISLAM MENSAJE AL MUNDO MUSULMÁN
A todos nuestros hermanos en Dios, los musulmanes del mundo entero, en esta fiesta del cese del ayuno primero del siglo XV de la Hégira. Hermanos creyentes: Una vez más la fecha del fin del ayuno ofrece a los cristianos la oportunidad de compartir vuestra alegría y presentaros sus mejores deseos, juntos podemos dar gracias a Dios único y misericordioso. En esta feliz ocasión dejadnos expresaros, hermanos creyentes, los sentimientos de edificación que nos invaden ante vuestro testimonio de sumisión a Dios y de piedad. Su Santidad el Papa Juan Pablo II ha evocado repetidas veces esta fidelidad ante las comunidades musulmanas que se goza en saludar a lo largo de sus viajes. Vuestra adhesión a Dios es un consuelo en un mundo que parece olvidar, cada vez más al Creador y parece tener los ojos clavados en la tierra. Nuestro mismo propósito de respetar los designios de la Divina Providencia, ¿acaso no constituye una invitación apremiante a actuar juntos para salvar del materialismo al hombre y sus valores? Muchos hay entre vosotros que piensan como nosotros. Los refugiados, los emigrantes, las minorías, los débiles, los pobres y todos los marginados de nuestro mundo nos esperan. Conscientes de nuestras diferencias, trabajemos juntos dentro del respeto mutuo de nuestras convicciones, rechacemos los prejuicios que figuran en el origen de nuestras tensiones, a fin de construir un mundo de justicia y misericordia, donde el hombre glorifique a Dios, creador suyo. Jean JADOT
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