La Santa Sede Menu Ricerca
La Curia Romana Pontifici Consigli


   
   
   
   
   
   

NOTICIARIO 18/2009

 

 

 


El Presidente a los Lectores

 

Queridos amigos:

                                                                                                                          
Entre los argumentos que leerán en este número del Noticiario figura el encuentro internacional “De Sydney 2008 a Madrid 2011”, organizado por el Consejo Pontificio para los Laicos el mes de abril para lanzar el itinerario de preparación de la próxima Jornada Mundial de la Juventud; la dimensión que lo caracterizó fue un espíritu de profunda gratitud.

Gratitud, en la común acción de gracias a Dios por el don de la XXIII JMJ celebrada en Sydney. Fue un evento memorable, un Pentecostés renovado, una estupenda “epifanía” de una Iglesia joven y desbordante de alegría de la fe. En Sydney, los jóvenes nos sorprendieron una vez más por la “cantidad” y la calidad de la participación. De nuevo, fueron motivo de asombro por el hermoso testimonio que supieron dar de su fe. La JMJ 2008 ha sido un precioso don no sólo para la Iglesia en Australia y Oceanía, sino para la Iglesia universal. De ello dan fe los numerosos mensajes que, después de un año, continúan llegándonos de todas partes.

Gratitud, en filial agradecimiento al Santo Padre Benedicto XVI por su presencia y la palabra que quiso regalar a los jóvenes que estaban en Sydney. La JMJ de Sydney ha dejando en su corazón huellas tan profundas que en el discurso dirigido a la Curia Romana con ocasión del intercambio de los saludos para Navidad 2008, él la presentó como una especie de clave de lectura de todo el año. Al explicar que, para entender el “secreto” del éxito de este evento – «una gran fiesta de fe», el «compartir la alegría de ser cristianos» –, hay que tener en cuenta un «largo camino exterior e interior […] Las Jornadas solemnes son  sólo la culminación de un largo camino, en el que se encuentran unos con otros, y juntos se encuentran con Cristo».

En fin, gratitud a la Iglesia de Sydney y a toda la Iglesia que vive en Australia por la exquisita acogida que han proporcionado a los jóvenes de mundo, llegados a aquella tierra para reunirse con el Sucesor de Pedro.

El encuentro, iniciando así el itinerario espiritual que guiará a los jóvenes del mundo a Madrid en 2011, señaló otra etapa importante en la historia de las JMJ. El paso de la Cruz de las JMJ y del Icono de la Virgen Salus Populi Romani de manos de los jóvenes australianos a manos de los jóvenes españoles, en el Domingo de Ramos, ha sido una vez más un signo conmovedor y elocuente de que el camino de fe de los jóvenes a través de los continentes no se detiene, sino que continúa avanzando. La próxima meta, indicada por el Papa a los jóvenes, tendrá como lema: «Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe» (Col 2, 7). Acoger la JMJ es una tarea grande, porque grandes son las expectativas de toda la Iglesia: de los pastores y especialmente de los jóvenes… Por ello decimos a los amigos españoles: ¡Ánimo! ¡No tengáis miedo! ¡Estamos con vosotros! ¡Podéis contar con nuestra ayuda! Porque sabemos que precisamente en las JMJ se juega la grande causa de la Iglesia: la evangelización de las nuevas generaciones – que ciertamente es una prioridad de la misión de la Iglesia en cada tiempo.

En el encuentro tomaron parte delegados de unos setenta países de cinco continentes y representantes de treinta y cuatro movimientos eclesiales y asociaciones juveniles. Es una participación significativa del nexo orgánico y profundo que vincula las Jornadas Mundiales de la Juventud con la pastoral juvenil ordinaria en las Iglesias particulares diseminadas por todo el mundo.

Las JMJ se han convertido en verdaderos y auténticos “catalizadores” del compromiso pastoral de la Iglesia en favor de las jóvenes generaciones. Cumplen una función de orientación, inspiración y estímulo que es valiosa. Con los años se han revelado como un extraordinario observatorio del mundo juvenil a escala planetaria que permite individuar tendencias emergentes entre los jóvenes que difícilmente encuentran espacio en los medios. Gracias a las Jornadas Mundiales de la Juventud ha nacido una nueva generación de jóvenes, capaces de ir contracorriente con respecto a la cultura dominante. Son jóvenes en búsqueda del sentido verdadero de la vida, los jóvenes del “sí” a Cristo y a su Iglesia. Son, estadísticamente, una minoría, pero una “minoría creativa” (Arnold Toynbee), una de aquellas minorías que son determinantes para el futuro de la humanidad.

El siervo de Dios Juan Pablo II, «genial iniciador de las Jornadas Mundiales de la Juventud» (Benedicto XVI), las ha definido como «laboratorios de la fe joven». Pero con el curso de los años, las JMJ se han convertido además en “laboratorios de pastoral juvenil”. A éstos se debe no sólo el nacimiento de una “nueva generación de jóvenes”, sino también el nacimiento de una “nueva generación de agentes de pastoral juvenil”. Son personas capaces de dar una respuesta a los verdaderos problemas de los jóvenes de nuestro tiempo y a la nostalgia más aguda de su corazón, porque son capaces de acoger aquella “provocación” de las JMJ evocada por Benedicto XVI en Colonia en el año 2005 cuando, hablando a los obispos alemanes, dijo: los jóvenes, «con su fe y con su alegría en la fe, sigan siendo para nosotros una provocación para vencer la pusilanimidad y el cansancio, y nos impulsen a indicarles el camino, con la experiencia de la fe que se nos da, con la experiencia del ministerio pastoral […] de forma que su entusiasmo encuentre también un justo orden». La palabra “provocación” dice bien la naturaleza del desafío pastoral que las JMJ representan para la Iglesia. Nos recuerda que la pastoral de las jóvenes generaciones no es un apéndice de la acción pastoral ordinaria de la Iglesia, sino el centro, el corazón. Es una tarea muy exigente, porque los jóvenes tienen expectativas muy exigentes con respecto a los adultos, en los que, además de maestros, quieren encontrar testigos auténticos y coherentes. La pastoral juvenil no debe conocer rutina ni mediocridad. Exige una constante conversión del corazón y la continua búsqueda de caminos siempre nuevos para anunciar a Cristo. Pide una verdadera “pasión pastoral” para los jóvenes. En el actual contexto cultural, caracterizado por una “emergencia educativa” sobre la cual Benedicto XVI no cesa de llamar nuestra atención, es una tarea ardua. Pero este es también un desafío al que hay que saber responder uno quiere ganarse a los jóvenes para el Evangelio.
 


Card. Stanisław Ryłko
Presidente

                                                                                    

 

La XXIV Asamblea Plenaria del Consejo Pontificio para los Laicos

 

Diferentes intervenciones del Santo Padre Benedicto XVI han puesto el tema del compromiso de los fieles laicos en la vida pública dentro de las urgencias actuales de la agenda eclesial.

A las fuertes exhortaciones expresadas en la inauguración de los trabajos de la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano de Aparecida, en mayo de 2007, donde Benedicto XVI declaró que «conviene colmar la notable ausencia, en el ámbito político, comunicativo y universitario, de voces e iniciativas de líderes católicos de fuerte personalidad y de vocación abnegada, que sean coherentes con sus convicciones éticas y religiosas», les siguieron las palabras pronunciadas en Cerdeña, durante la visita pastoral en Cagliari, en septiembre de 2008. En aquella ocasión, el Santo Padre pidió a los fieles evangelizar, en los diferentes ambientes, el mundo de la política «que necesita una nueva generación de laicos cristianos comprometidos».

El Papa volvió después al argumento en su discurso a los participantes en la Asamblea plenaria del Consejo Pontificio para los Laicos, el 15 de noviembre de 2008, encomendando al dicasterio la tarea de seguir «con diligente cuidado pastoral la formación […] de una nueva generación de católicos comprometidos en la política, que sean coherentes con la fe profesada, que tengan rigor moral, capacidad de juicio cultural, competencia profesional y celo de servicio para el bien común».

El Consejo Pontificio para los Laicos quiere responder eficazmente al Santo Padre, y para ello dedicará la próxima Asamblea plenaria, que tendrá lugar en Roma del 20 al 22 de mayo de 2010, a este ámbito tan particular y delicado de la misión de los fieles laicos.

La preparación de esta cita ya se ha iniciado con encuentros y diferentes consultas. Entre los momentos más significativos se encuentra la reunión – a la que nos referiremos después – que tuvo lugar en la sede del dicasterio con los responsables y representantes de los movimientos y nuevas comunidades.

 

 

Fieles laicos y compromiso en la vida pública:

Exigencias y desafíos actuales

 

Llamados a interesarse también por los diferentes ámbitos de la vida pública, los movimientos eclesiales y nuevas comunidades, a la luz de su riqueza carismática, educativa y misionera y de experiencias de compromiso político que ya han sabido promover y animar, pueden dar una contribución notable a la reflexión que el Consejo Pontificio para los Laicos ha hecho sobre este argumento. Con esta convicción, los superiores del dicasterio invitaron a los responsables y representantes de diferentes realidades eclesiales internacionales a un encuentro, que se organizó en su sede para el 16 de mayo de 2009, en el cual intervinieron ponentes y testigos particularmente implicados en el mundo de la política.

La ponencia fundamental, que dio pie después a un amplio debate entre los presentes, fue solicitada a S.E. Mons. Rino Fisichella, presidente de la Pontificia Academia por la Vida, invitado principalmente por el servicio que desempeña en Montecitorio como rector de la capellanía de la Cámara de los Diputados. “Exigencias y desafíos actuales puestos a los fieles laicos con respecto al compromiso político” fue el tema al que le siguió una rica reflexión. En un tiempo en el que «se nota un distanciamiento de la responsabilidad pública», hay que reafirmar, dijo Mons. Fisichella, cuánto «el compromiso en la política es para el creyente una acción de verdad “pastoral”; ésta pertenece al tejido mismo de la fe que se hace testigo responsable para la construcción de la sociedad».

La primera exigencia es, por lo tanto, la de «comprender el momento que se está viviendo». Hoy en día, los cambios son de tal modo que determinan «el modo de pensar y concebir la existencia personal para los próximos siglos». El prelado advierte que, en esta fase, «se puede estar en la ventana observando los cambios, o sumergirse en una tarea directa para intentar entenderlos y orientarlos hacia un objetivo positivo». Otra exigencia determinante es poner al centro de la acción cultural y política el binomio de la dignidad de la persona y el bien común. «Pensar que la realidad de la vida mejora sólo porque se califican algunos servicios del bienestar, es ilusorio y decepcionante si después la concepción misma de la vida se deja al arbitrio individual». Por ello es necesario que «ante algunas leyes ya aprobadas por diferentes parlamentarios o en vías de resolución, se haga un juicio carente de ambigüedad, que haga emerger la instancia ética como elemento fundamental, para verificar si se está respetando la dignidad de la persona y el bien común. Este tipo de hacer política es eficaz – afirmó Mons. Fisichella – y es capaz de disipar el recelo y el velo de la indiferencia, extendido especialmente entre las jóvenes generaciones, que no consiguen captar la pasión por el compromiso político».

En un tiempo en el que los así llamados «derechos individuales» corren el riesgo – y lamentablemente así sucede – de llevar la voz cantante, un verdadero desafío, al que el político está llamado a responder, es el de realizar «una recuperación del concepto de la ley natural como principio de referencia». Esta ley permite afirmar que «los derechos a los que recurrimos no son un invento nacido del ingenio de los hombres de épocas históricas remotas, sino el descubrimiento perenne que cada generación hace de un contenido que se le ofrece como un verdadero don». Es una realidad ya reconocida por los antiguos filósofos griegos y romanos; una realidad que en el mundo bíblico se llama “ley de Dios”, y donde el concepto es enriquecido por una «originalidad propia» con respecto a lo que se entendía en el mundo greco-romano: «la justicia no consiste solamente en el respeto de la norma – explicó Fisichella – aunque fuera la que más perfectamente se pudiera formular, y no se concluye ni siquiera garantizando la igualdad entre todos los habitantes. La justicia que se conjuga con el derecho tiene que ser capaz de hacer emerger las verdaderas necesidades de cada persona, para que pueda encontrar su lugar y desempeñar su rol correspondiente en el seno de la comunidad». Así, «la búsqueda de la dignidad de la persona persiste en la visión bíblica como el verdadero fundamento del derecho, y la justicia no satisface plenamente su fin si no ha realizado esta tarea». El desafío es, por ello, reconocer honestamente que «en épocas diversas y en regiones diferentes surge una idea fundamental y compartida: existe un contenido ético que el hombre conoce por sí mismo, inmediatamente, casi en modo instintivo, como una norma a la que atenerse para poder vivir conforme a lo que él es y que encuentra una respuesta en aquel espacio inmenso y diversificado que es la naturaleza».

Como conclusión, Mons. Fisichella subrayó que los principios como el de la “autonomía” y “laicidad” del Estado son «expresiones de la originalidad del cristianismo y su preciosa herencia para las diferentes democracias», una conquista que ya «lleva la indeleble presencia del cristianismo». Será la conciencia del ciudadano individual, y más en particular el parlamentario individual, el que tenga que tomar decisiones, consciente de que estas decisiones determinarán la propia vida y la de enteras generaciones. «No obstante, la conciencia nunca es neutral. Ésta obliga a elegir en base a principios que, además de estar inscritos en lo íntimo de cada persona, necesitan ser explicitados, motivados y madurados. Es por este motivo – concluye el prelado – que todos estamos llamados a apoyar el compromiso de cuantos dedican su vida al servicio de la política. No es retórica pensar que los que poseen responsabilidad en la política tienen la obligación de poseer referencias decisivas que hay que observar para juzgar las propias acciones. La Palabra de Dios junto con el magisterio vivo de la Iglesia son para el católico un faro que permite acceder a una comprensión más profunda de la propia vocación y actuación política».

Al querer escuchar también los testimonios de quienes en primera persona están comprometidos en la política e intentan vivir el compromiso en coherencia con la fe profesada, fueron invitados al encuentro el ex-presidente del Parlamento Europeo, Mario Mauro, y el diputado italiano, Savino Pezzotta. De las reflexiones y los testimonios de ambos surgió la necesidad de combatir las ideologías que aún amenazan la política, como la del relativismo ético que se puede combatir con una sincera búsqueda de la verdad y de la naturaleza de las cosas; es la necesidad de estar dentro de la comunidad de los hombres para que se combata el miedo y la indiferencia frente a la política; es una dificultad fuertemente advertida en nuestros días, que causa sufrimiento y soledad al que en cambio se compromete.

En modo particular, el diputado Pezzotta puso algunas preguntas que después fueron retomadas en el debate que siguió a la ponencia y los testimonios: ¿Cuál es la unidad que se puede crear entre los creyentes en el pluralismo de las propuestas de los partidos? ¿Cuáles son los elementos de unidad que pueden plantear los católicos? Y por último, ¿Quién forma la nueva clase política?

Durante el debate se presentaron varias e interesantes solicitudes, siendo la más frecuente, sin duda, la necesidad de una nueva formación que implique la colaboración entre las diferentes “instituciones” formativas (familia, escuela, comunidad cristiana…), la atención a las necesidades de todos los hombres y la capacidad de descifrarlas, la valorización de la Doctrina social de la Iglesia, la profundización de los conceptos de institución y autoridad en un tiempo en el que están perdiendo la credibilidad. La corrupción, la práctica de la injusticia y una errada concepción de la política vista exclusivamente como una actividad que permite generosas ganancias, son heridas que hay que curar, por ejemplo en los países africanos, pero no sólo ahí.

Además se habló de la urgencia de eliminar la separación que se ha creado entre la comunidad cristiana y el laico que se quiere comprometer en el campo público. La política se aprende haciendo política, se aprende en el mismo campo, en medio de la gente. Por ello, es importante animar a los jóvenes de los diferentes movimientos y nuevas comunidades a un compromiso concreto, aunque habrá que tener presente la “vocación” al compromiso público de cada joven, discernir quién está de verdad llamado a seguir este camino. Estar en el campo significa también estar con aquellos que sufren, los pobres, porque sólo en base a experiencias de este tipo de puede estar en condiciones de hacer propuestas en su favor.

En un tiempo en el que ya no existe una visión compartida de la ley natural y de los derechos del hombre, es necesario volver a valorizar el diálogo leal con quien piensa de otra manera que nosotros, en la búsqueda de una nueva plataforma para el bien de los individuos y de la colectividad.

Concluyendo el debate, el presidente del dicasterio, cardenal Ryłko, destacó que el Consejo Pontificio para los Laicos es muy consciente de lo delicado del campo que se debe afrontar. Es una tarea nada fácil, a la que hay que dedicar tiempo, escucha y confrontación.

 

 

Cambios de oficiales del Consejo Pontificio para los Laicos
 

 

En el mes de abril del presente año, la Srta. Ana Cristina Villa Betancourt llegó a nuestro dicasterio para prestar su servicio en la dirección de la Sección Mujer, tomando el puesto de la Dra. María Rocío Figueroa Alvear de quien recordamos el brillante empeño y profesionalidad en la organización del Congreso por los veinte años de la Mulieris Dignitatem “Mujer y varón: la totalidad del humanum”, que tuvo lugar en el mes de febrero de 2008.

La Srta. Villa, originaria de Medellín (Colombia), es miembro de la Fraternidad Mariana de la Reconciliación. Le damos la bienvenida y le deseamos un trabajo proficuo al servicio del dicasterio y la Santa Sede.

Una cordial bienvenida también al Dr. Stefano De Pasquale Ceratti, casado y padre de una hija de siete meses, que a inicios de septiembre ha llegado para aumentar las filas de nuestro secretariado.

 

 

 

De Sydney 2008 a Madrid 2011

El encuentro internacional de responsables de pastoral juvenil

 

«Queridos amigos: El próximo Domingo de Ramos celebraremos en el ámbito diocesano la XXIV Jornada Mundial de la Juventud. Mientras nos preparamos a esta celebración anual, recuerdo con enorme gratitud al Señor el encuentro que tuvimos en Sydney, en julio del año pasado. Un encuentro inolvidable, durante el cual el Espíritu Santo renovó la vida de tantos jóvenes que acudieron desde todos los lugares del mundo. La alegría de la fiesta y el entusiasmo espiritual experimentados en esos días, fueron un signo elocuente de la presencia del Espíritu de Cristo. Ahora nos encaminamos hacia el encuentro internacional programado para 2011 en Madrid y que tendrá como tema las palabras del apóstol Pablo: “Arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe” (cfr. Col 2,7). Teniendo en cuenta esta cita mundial de jóvenes, queremos hacer juntos un camino formativo, reflexionando en 2009 sobre la afirmación de san Pablo: “Hemos puesto nuestra esperanza en el Dios vivo” (1 Tm 4,10), y en 2010 sobre la pregunta del joven rico a Jesús: “Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?” (Mc 10,17)».

Con estas palabras resumía el Papa Benedicto XVI, al inicio de su mensaje para la XXIV Jornada Mundial de la Juventud, el camino pastoral propuesto a los jóvenes del mundo para los próximos años: de Sydney a Madrid, del soplo vivificante del Espíritu a la solidez de la fe en Cristo, a través de la esperanza y el encuentro personal con Jesús.

Siguiendo este itinerario, los responsables de la pastoral juvenil de todo el mundo se encontraron en Roma del 3 al 5 de abril de 2009, invitados por el Consejo Pontificio para los Laicos, para asistir al congreso “De Sydney 2008 a Madrid 2011”. Se trató del primer encuentro internacional en vistas del evento en Madrid, un importante momento de evaluación y reflexión, con la presencia total de los Comités organizadores de España y Australia, junto a los delegados de unos setenta países y treinta y cinco comunidades, asociaciones y movimientos juveniles católicos, siendo en total unos ciento cincuenta participantes.

Los trabajos se iniciaron el viernes 3 de abril con el discurso inaugural del cardenal Stanisław Ryłko, presidente del Consejo Pontificio para los Laicos. «Las Jornadas Mundiales de la Juventud – observó el cardenal – se han convertido providencialmente en “catalizadores” de la preocupación pastoral de la Iglesia a favor de las jóvenes generaciones, y desempeñan una importante función de orientación, inspiración y estímulo... Gracias a las JMJ, ha nacido una nueva generación de jóvenes capaces de ir contracorriente con respecto a la cultura postmoderna dominante». «Con el correr de los años – dijo – las JMJ se han convertido también en “laboratorios de pastoral juvenil”. Les debemos a las JMJ no sólo el nacimiento de una “nueva generación de jóvenes”, sino también el nacimiento de una “nueva generación de agentes de la pastoral juvenil”, capaces de responder a los verdaderos problemas de los jóvenes de nuestro tiempo». «La palabra “provocación” – concluyó – reproduce muy bien la naturaleza del desafío pastoral que las JMJ representan para la Iglesia. Recordemos que la pastoral de las jóvenes generaciones no es un apéndice en la acción pastoral de la Iglesia, sino su centro, su corazón».

A continuación se procedió al análisis de los frutos principales de la JMJ 2008 a nivel local, a cargo del cardenal George Pell, que subrayó especialmente el aumento de las vocaciones: «En Nueva Zelanda – dijo el arzobispo de Sydney – el seminario nacional ha prácticamente duplicado el número de seminaristas. También en Australia se registra un aumento, una tendencia que asimismo habíamos notado en la preparación a la JMJ. Es un signo claro de que se ha hecho un buen trabajo, no sólo bajo el aspecto logístico sino también y sobre todo en el espiritual, haciendo participar a las parroquias, diócesis, movimientos y asociaciones, pasando por las escuelas y familias». No obstante, el cardenal alertó de estar en guardia ante fáciles entusiasmos: «La JMJ no es una magia. La preparación tiene que ser seria y estar al servicio de la evangelización». Seguidamente, se detuvo en una importante transformación: «Australia mira hoy con otros ojos a la Iglesia; no sólo jóvenes, sino muchas personas se han acercado y su fe se ha fortalecido. También los no católicos nos miran con ojos diferentes y esto es para nosotros importante».

A continuación, Mons. Anthony Fisher, obispo auxiliar de Sydney, expuso los primeros datos de una investigación encargada por el Comité organizador local sobre el impacto de la JMJ 2008 en los participantes australianos. Estos son los principales resultados:

– Siete de cada diez personas consideran la experiencia vivida como una de las mejores de su vida (los momentos más apreciados fueron la Vigilia, el Vía Crucis y la Mesa final);

– para los jóvenes ha sido muy importante descubrir la Iglesia universal y compartir con los demás coetáneos la propia fe, que desean vivir ahora y profundizar con mayor seriedad;

– muchos jóvenes han decidido ser “más atentos” hacia el prójimo y comprometerse en diferentes tipos de servicio; algunos han descubierto la propia vocación al sacerdocio;

– la JMJ ha producido una notable renovación también a nivel parroquial y diocesano.

Después, con una viva visión de conjunto, con imágenes y datos, Danny Casey, director ejecutivo del Comité australiano, presentó a los delegados un balance organizativo del evento de Sydney.

En la tarde del viernes, se prosiguió con los trabajos a partir de cuatro experiencias de pastoral juvenil nacional, presentadas por la Hna. Eileen McCann, delegada de los Estados Unidos, P. Salvador Niciteretse, de Burundi, Jessica Joy Candelario, representante juvenil de la Federación de las Conferencias Episcopales Asiáticas, y D. Nicolò Anselmo, director del servicio de pastoral juvenil de la Conferencia Episcopal Italiana. Fueron experiencias representativas de situaciones extremamente diversas, pero unidas por la visión de la JMJ como motor propulsor para la pastoral ordinaria.

Por último, D. Eric Jacquinet, responsable de la Sección Jóvenes del Consejo Pontificio para los Laicos, concluyó la jornada con una reflexión sobre la JMJ y la pastoral juvenil de la Iglesia: intuición profética de Juan Pablo II, la Jornada Mundial de la Juventud es mucho más que un evento; ésta es en realidad una experiencia personal y comunitaria que tiene como finalidad el volver a poner a Cristo al centro de la fe y vida de los jóvenes. Todo el programa pastoral de la JMJ está de hecho orientado al encuentro con Cristo en la Iglesia: los jóvenes están llamados a ir juntos al encuentro de Él, yendo en peregrinación por los caminos del mundo y experimentando juntos la alegría de la fe – reviviendo, en cierto modo, la experiencia de los discípulos de Emaús.

Con la jornada del sábado 4 de abril se dio comienzo al itinerario de la preparación hacia la JMJ de Madrid (2011). «España evangelizada, España evangelizadora, ese es el camino. No descuidéis nunca esa misión que hizo noble a vuestro País en el pasado y es el reto intrépido para el futuro» (Juan Pablo II, Madrid, 4 de mayo de 2003): esta frase pronunciada por Juan Pablo II durante su último viaje a España, fue el centro de la reflexión del cardenal Antonio María Rouco Varela, que habló a los ciento cincuenta delegados sobre el significado de la JMJ para la Iglesia española. A diferencia de Australia, explicó el arzobispo de Madrid, España es un país en el que el Evangelio ha resonado desde sus orígenes y que conoce una gran vitalidad de la fe, siendo lugar de nacimiento de numerosos e importantes caminos vocacionales; pero también ella, como toda Europa, necesita renovar sus raíces cristianas. Tenemos que anunciar de nuevo el Evangelio, concluyó el cardenal, tenemos que hacer nuestra la tarea de la nueva evangelización, llevando a Cristo allí donde no es conocido, y este es uno de los principales desafíos de la próxima JMJ.

Mons. César Augusto Franco Martínez, obispo auxiliar de Madrid y presidente del Comité organizador, delineó a continuación los elementos centrales del camino de preparación hacia la XXVI JMJ, utilizando como hilo conductor el magisterio del Papa Benedicto XVI. La primera indicación que hay que tener presente, dijo el obispo, es que la Jornada mundial es el fruto de un largo camino exterior e interior; por ello, «un elemento fundamental de la preparación debe ser el de la celebración de la fe, introduciendo a los jóvenes en el misterio de la liturgia y de los misterios cristianos» y la catequesis tiene que ser vista como «elemento propio de formación» para ayudar a los jóvenes a encontrar la verdad en Jesucristo. En segundo lugar, en la preparación «la convicción… debe arraigarse cada día más en los jóvenes cristianos de que dentro de ellos está esta fuerza dinámica de futuro, que, en términos paulinos, es la esperanza que no defrauda… como protagonistas de la vida de la Iglesia, y de la JMJ en particular, irradiarán en sus amigos y contemporáneos la verdad que llevan dentro». Mas, advertía Mons. Franco, «conviene subrayar que se trata de la dinámica de Dios, que busca expandirse al mundo entero desde nosotros». Por último, la JMJ debe hacer vivir a los jóvenes la alegría de la fe, mostrando qué es en verdad una “fiesta”: «Se trata de vivir la Iglesia como una comunión de relaciones en Cristo… Es importante que… sepamos animar todo desde esta experiencia de la vida que Cristo crea entre sus miembros y al que, especialmente los jóvenes, se adhieren una vez descubierta». Por ello hay que acompañar a los jóvenes en el descubrimiento del amor de Dios, presente en la Iglesia, y llevarlos a un compromiso del amor hacia el próximo, también con hechos concretos de comunión eclesial, servicio y solidaridad.

A continuación, D. Javier Egea López-Fando, delegado de la Conferencia Episcopal Española, ilustró la situación de la pastoral juvenil en España, sin omitir los problemas, pero mirando las perspectivas y oportunidades creadas por la Jornada Mundial de la Juventud. Acompañaron su exposición los testimonios de dos jóvenes, que contaron su camino para estar siempre más “arraigados y edificados en Cristo, firmes en la fe”.

En la tarde del sábado, el Comité español presentó los primeros proyectos para la acogida en la JMJ de Madrid, en los que ya está trabajando para que pueda ser «la mejor JMJ posible». Seguidamente, los delegados tuvieron la oportunidad de dirigir a los miembros del Comité preguntas, sugerencias, consideraciones pastorales y prácticas, también a partir de la experiencia de Sydney. Fue un vivo debate que tocó muchos puntos, pero sobre todo el tema de la participación de los jóvenes provenientes de África, Sudamérica, Asia o de países con desventajas, para que se haga todo lo posible de modo que todos los jóvenes del mundo tengan las mismas oportunidades de vivir la JMJ.

Los trabajos prosiguieron con el Mensaje del Papa Benedicto XVI a los jóvenes con ocasión de la XXIV Jornada Mundial de la Juventud, presentado por Mons. Josef Clemens, Secretario del Consejo Pontificio para los Laicos. Recordando los temas de las JMJ 2009, 2010 y 2011, indicados en el Mensaje, Mons. Clemens destacó que el trayecto formativo, que el Santo Padre propone a los jóvenes cristianos para prepararse al evento de Madrid, «gira, en un cierto modo, en torno a las tres virtudes teologales: esperanza, caridad y fe. Como escribía el poeta francés Charles Péguy, si las tres virtudes son como hermanas, la esperanza es la más pequeña, que tira de la mano a las otras dos. Esto es, sin duda, el motivo por qué nuestro camino comienza por la esperanza», un tema muy querido del Papa Benedicto XVI, al cual los jóvenes son particularmente sensibles. De hecho, son ellos las primeras víctimas de la «crisis de la esperanza» tan extendida en la sociedad actual. «La misión de la Iglesia es, por lo tanto, devolverles a los jóvenes lo que es vital para ellos: la capacidad de ir adelante, de comprometerse, de formarse para preparar su futuro y el futuro del mundo», convirtiéndose así en «testigos de la esperanza».

En la tarde, le tocó al cardenal Ryłko la tarea de cerrar los trabajos del congreso, poniendo el acento en el papel de los responsables nacionales de pastoral juvenil: «Lo que hemos vivido aquí en estos días ha sido inspirado precisamente desde el Cenáculo de Pentecostés, es decir de la experiencia de una Iglesia verdaderamente joven…, que estalla con su entusiasmo misionero hasta los confines de la tierra, experiencia de la Iglesia a la escucha del Espíritu Santo… ¿Qué es lo que dice el Espíritu Santo a la Iglesia en este momento histórico? El Espíritu Santo llama a la Iglesia para la misión de siempre: evangelizar, en modo particular, a las jóvenes generaciones. Ésta es una prioridad para vosotros que os encontráis en el corazón mismo de la obra evangelizadora de la Iglesia». Recordando después la intuición del Papa Juan Pablo II, que dio vida a las JMJ, y su confianza en los jóvenes en una época en la que aún se les miraba con recelo, el cardenal volvió a evocar la entrega de la Cruz a los jóvenes hace 25 años, en el Domingo de Pascua: «Fue un gesto profético… la historia de la Cruz de las JMJ está hoy llena de verdaderos milagros de gracia y conversión… gracias a esta Cruz, la JMJ es un evento permanente en la Iglesia, porque dondequiera que vaya la Cruz de las JMJ, se realiza una Jornada mundial».

Con estas palabras en la memoria, los delegados participaron en la mañana del 5 de abril en la misa del Domingo de Ramos, presidida por Benedicto XVI en la plaza de San Pedro, con la celebración de la XXIV Jornada Mundial de la Juventud y la tradicional entrega de la Cruz de las JMJ de los jóvenes australianos a los jóvenes españoles: un momento significativo y emocionante que ha marcado materialmente el “cambio de relevos” entre los jóvenes de Sydney y los de Madrid, poniendo como referencia, una vez más, al camino de las Jornadas mundiales la pura realidad de la Cruz, la esperanza suscitada por el Resucitado.

 

En la página Internet http://www.laici.org/ index.php?p=homegiovani se pueden encontrar todos los textos de las principales intervenciones durante el congreso.

 

 

Las actividades del Centro Internacional Juvenil San Lorenzo

 

El Centro Internacional Juvenil San Lorenzo ha continuado en estos meses su misión de acogida, dirigida a grupos de jóvenes peregrinos de visita en Roma y también a numerosos estudiantes extranjeros inscritos en los ateneos de la ciudad, que encuentran aquí relaciones de amistad y formación espiritual. La misa internacional del viernes por la tarde sigue siendo el momento fuerte de cada semana, con la presencia de un cardenal u obispo de la Curia Romana o un país extranjero.

El 22 de abril – 25º aniversario de la Cruz de las JMJ – el Papa Benedicto XVI volvió a entregar esta misma Cruz a los jóvenes del Centro, pidiéndoles que la lleven a cada rincón de la tierra como signo del amor de Cristo. Como respuesta a esta invitación, una delegación del Centro fue al Abruzo, en los días en torno a Pentecostés, para llevar la Cruz de las JMJ a los lugares destruidos por el terremoto del pasado mes de abril. Después de una celebración en la Casa del Estudiante de Áquila, lugar símbolo del sufrimiento de la ciudad, la Cruz fue acogida en el campamento de tiendas de ocho pueblos, donde fue recibida por los presentes en un clima de intensa oración y veneración.

Así, la Cruz de las JMJ se presenta cada vez más como un instrumento para hacer tocar a los jóvenes el amor de Cristo y la esperanza dada por Dios. El Centro, como “santuario de la Cruz de las JMJ”, no escatima energías para proponer esta gracia. Pronto estará listo un nuevo vídeo de presentación de la Cruz.

El inicio del nuevo año de actividades ve un nuevo equipo en la dirección del Centro: el nuevo director es D. Eric Jacquinet, responsable de la Sección Jóvenes del Consejo Pontificio para los Laicos, mientras que para la animación están llegando Bernard Marusic de Australia y Jill-Ann Martin de Bélgica, miembros de la Comunidad del Emmanuel. Agradecemos a Leen den Blauwn y Roselyne Lauwick, que han finalizado su misión, por todo el trabajo de-
sarrollado en los últimos años. En cambio, P. Benoît de Baenst prosigue con el servicio de capellán. Este equipo tiene como misión movilizar a nuevos voluntarios, miembros de movimientos y comunidades o estudiantes de Roma. Además, hará una nueva propuesta para los voluntarios que se comprometerán en la acogida de las personas: un trayecto de formación espiritual, comunitaria y misionera, compuesto por una serie de tardes o fines de semana entre noviembre y abril. De hecho, el Centro es un importante lugar para el descubrimiento de la fe y la Iglesia católica para tantos estudiantes extranjeros que se encuentran en Roma en el ámbito del proyecto Erasmus. Es tarea del Centro invitar y proponerles una formación como voluntarios misioneros. Como en los años precedentes, también la Emmanuel School of Mission se encargará de la vida del Centro, en particular de la animación musical de la misa internacional de los viernes y las misiones de evangelización con la Cruz de las JMJ.

 

 

El X Fórum Internacional de Jóvenes

 

Como cada tres años, del 24 al 28 de marzo de 2010 (poco antes del Domingo de Ramos) el Consejo Pontificio para los Laicos reunirá en un Fórum internacional a unos trescientos jóvenes, delegados de las conferencias episcopales y de los principales movimientos y asociaciones internacionales.

Después de los temas de los dos últimos Fórum, “Testimoniar a Cristo en el mundo de la universidad” (2004) y “Testimoniar a Cristo en el mundo del trabajo” (2007), el próximo Fórum tratará el tema: “Aprender a amar”. Con conferencias, mesas redondas, testimonios y grupos de trabajo, se intentará entender de qué modo pueden responder los jóvenes a la vocación cristiana del amor en el contexto actual, caracterizado por la crisis del matrimonio y la familia, el déficit educativo y el relativismo moral. Nos detendremos en la belleza del amor de Dios, en la visión cristiana de la sexualidad, en el noviazgo como preparación al matrimonio cristiano y el sacramento del matrimonio. Puesto que hay diversos modos de testimoniar el amor de Cristo, serán presentados algunos testimonios sobre las diversas vocaciones en la Iglesia: la vida religiosa, el sacerdocio, el compromiso social y político.

Además de la reflexión sobre el tema, el Fórum permitirá a los participantes, provenientes de todo el mundo, a vivir concretamente la dimensión eclesial, proponiéndoles también una experiencia espiritual de oración, de celebración de los sacramentos y de peregrinación a Roma siguiendo las huellas de los santos. De este modo, al regreso, los jóvenes podrán testimoniar con convicción a los coetáneos toda la belleza de la vocación del amor.

 

 

El asociacionismo deportivo en el mundo católico

Seminario de estudio

 

Cuando el siervo de Dios Juan Pablo II instituyó la Sección “Iglesia y Deporte” en el seno del Pontificio Consejo para los Laicos, una de las tareas principales que le encomendó fue la de promover una cultura del deporte abierta al desarrollo integral de la persona en el ámbito de la educación católica de los jóvenes. Es precisamente en los colegios católicos, oratorios, centros parroquiales y asociaciones y movimientos juveniles donde a menudo se cruzan tres caminos fundamentales para el crecimiento global de los jóvenes: el camino del deporte, la educación y la fe. De su entrelazamiento puede nacer la oportunidad de una pastoral muy rica y fecunda que los laicos pueden desarrollar por el bien de tantos chicos y chicas.

Después de haber dedicado el primer seminario, en el año 2005, a un análisis del fenómeno deportivo en la sociedad contemporánea en términos generales y, sucesivamente, el seminario del año 2007 a una indagación sobre el papel del capellán en el ámbito deportivo, orientaremos ahora nuestro interés hacia los laicos comprometidos con el deporte y sobre todo con el deporte juvenil de amateur.

Promoviendo el seminario “Deporte, educación, fe: para una nueva época del movimiento deportivo católico” – que tendrá lugar el 6 y 7 de noviembre de 2009 en “Villa Aurelia” en Roma -, la Sección “Iglesia y Deporte” se ocupará precisamente del asociacionismo deportivo en el mundo católico. Este nuevo seminario examinará y evaluará las oportunidades que el asociacionismo deportivo católico puede ofrecer a la misión educativa y a la evangelización.

Recientemente, el Santo Padre Benedicto XVI, encontrándose con el clero de Roma, afrontó en cierto modo esta temática, afirmando que «un oratorio» – y creemos que con ello podemos entender todos los centros deportivos que gestiona la Iglesia – debería constituir un lugar donde un joven «no sólo encuentre posibilidades para su tiempo libre, sino sobre todo que encuentre formación humana integral que le lleve a forjarse una personalidad completa» (26 de febrero de 2009). Por ello, estudiaremos cómo y de qué modo – y en qué condición – el deporte, vivido entre jóvenes de diversos ambientes eclesiales, puede ser una vía de formación humana integral de adolescentes y jóvenes.

Tomarán parte en esta iniciativa los responsables pastorales de las conferencias episcopales, representantes de asociaciones católicas a nivel nacional e internacional y personalidades con una vasta competencia y experiencia en el mundo deportivo profesional y juvenil.

La reflexión de la mañana de la primera jornada se concentrará en los factores y componentes necesarios de modo que estas actividades deportivas puedan convertirse en “lugares educativos”. Después, en la mesa redonda de la tarde – con la participación de atletas y entrenadores profesionales – se tendrá una extensa reflexión sobre lo que significa ser y formar verdaderos campeones, es decir educar hacia aquel comportamiento virtuoso que se convierte en estilo de vida dentro y fuera del campo, no sólo medido por la fama y la victoria.

La segunda jornada, en cambio, se dedicará a las oportunidades concretas que las asociaciones deportivas ofrecen para testimoniar a Cristo tanto en la obra directa de la evangelización, como en el ejercicio de la caridad cristiana y en el diálogo ecuménico e intercultural.

 

 

Reconocimientos jurídicos y aprobaciones estatutarias

 

El Consejo Pontificio para los Laicos:

Con decreto del 8 de diciembre de 2008, ha reconocido la Milicia de Santa María (rama femenina) como asociación internacional de fieles, aprobando los estatutos “ad experimentum”. La Milicia de Santa María se propone la santificación de sus miembros, la perfección de la caridad y la evangelización del mundo, en particular la de los jóvenes. La asociación responde a este ideal de santidad mediante el ofrecimiento total a la Inmaculada, Madre de Dios y Medianera de todas las gracias.

Con decreto del 21 de enero de 2009, ha reconocido la Asociación Internacional Renovación Carismática de Cristo Vivo, aprobando los estatutos “ad experimentum”. El carisma de la asociación, conforme a la experiencia y espiritualidad de la Renovación Carismática Católica, es rezar y proclamar la nueva evangelización en cualquier ambiente social para animar el orden temporal mediante el espíritu cristiano. La devoción, el amor y la experiencia personal del Espíritu Santo son el eje de la vida de la asociación.

Con decreto del 21 de enero de 2009, ha aprobado las modificaciones aportadas a los estatutos de la asociación L’Heure de Pré-sence au Cœur de Jésus.

Con decreto del 22 de enero de 2009, ha concedido la aprobación definitiva de los estatutos de la Federación Mundial de las Obras Eucarísticas de la Iglesia.

Con decreto del 6 de febrero de 2009, ha aprobado los nuevos estatutos de la Fédération Internationale des Mouvements de Jeunesse Catholique d’Action Paroissiale.

Con decreto del 25 de marzo de 2009, ha aprobado los nuevos estatutos de la International Young Catholic Students.

Con decreto del 2 de abril de 2009, ha reconocido el Organismo Internazionale di Servizio del Sistema delle Cellule Parrocchiali di Evangelizzazione, aprobando los estatutos “ad experimentum”. El Organismo reúne y coordina las Células Parroquiales de Evangelización, pequeños grupos de fieles laicos vinculados por relaciones familiares, de trabajo o amistad, que se reúnen semanalmente para profundizar la propia fe y evangelizar el propio ambiente. La idea que inspira todo el Sistema es la de ofrecer ocasiones de conversión personal y comunitaria dentro de las parroquias, haciéndolas así una comunidad ardiente de fieles.

Con decreto del 20 de junio de 2009, ha aprobado las modificaciones aportadas a los estatutos de la Communauté de l’Emmanuel.

Con decreto del 29 de junio de 2009, ha reconocido la Unione Cattolica Internazionale di Servizio Sociale - Madeleine Delbrêl como asociación internacional de fieles, aprobando los estatutos “ad experimentum”. Se trata de la reactivación de la homónima asociación de fieles que actuó en la primera mitad del siglo XX e intenta favorecer y difundir el sentido cristiano del servicio social iluminándolo con el Magisterio de la Iglesia. Renacida en el año 2006, la UCISS quiere actualizar las metas de la asociación original a la luz de la evolución sociocultural de las profesiones sociales y las nuevas exigencias y cuestiones éticas contemporáneas.

Con decreto del 29 de junio de 2009, ha aprobado los nuevos estatutos de la Conferencia Internacional Católica  del Guidismo.

Actualmente, el dicasterio está procediendo al examen de las solicitudes de reconocimiento canónico presentadas por las siguientes asociaciones laicales: Movimiento Apostólico de Schönstatt, Movimiento de la Palabra de Dios, Legio Mariae, Communauté du Chemin Neuf, Comunità Gesù Risorto, Misioneros de la Esperanza, Famiglia della Speranza, Comunità Nuovi Orizzonti, Hogar de la Madre, Movimiento Athletae Christi, Comunidades Cristianas Comprometidas EAS, Movimento Apostolico, Jesus Youth.

 

 

Visitas ad limina

 

En el primer semestre del año 2009, el dicasterio recibió a obispos de rito latino de la Federación Rusa, a un grupo de obispos nigerianos, a tres grupos de la Conferencia Episcopal Argentina, a obispos de Perú, Venezuela y Vietnam. Como se puede ver, se trata de grupos provenientes de cuatro continentes, en su mayoría de países latinoamericanos.

Los obispos de Rusia nos pusieron al día sobre los progresos realizados por la grey católica dispersa por el inmenso país soviético. Nos comentaron sobre el fortalecimiento de las relaciones con la China ortodoxa, no sólo a nivel de autoridades eclesiásticas, sino también entre los fieles; no faltan jóvenes que miren con interés a la Iglesia católica. También los movimientos eclesiales y las nuevas comunidades dan una aportación importante al ecumenismo y la evangelización.

Del diálogo con los obispos nigerianos emergieron los principales problemas que afligen el país: la relación con el Islam, siempre agresivo, la concepción pagana del matrimonio, el tribalismo, la difusión de las sectas, la permanencia de supersticiones ancestrales, la formación inadecuada, las dificultades de los jóvenes, la secularización, la pobreza, concentrada especialmente en algunas zonas. No obstante, frente a desafíos tan exigentes, no faltan motivos concretos de esperanza. Nos confirmaron que los laicos en Nigeria desempeñan un papel fundamental: muy numerosos son los catequistas y responsables de las pequeñas comunidades, el asociacionismo está muy difundido, tanto el más tradicional como los movimientos y nuevas comunidades, en modo particular la Renovación Carismática Católica. La Iglesia nigeriana, junto a toda la Iglesia que está en África, sigue el modelo pastoral de Iglesia “familia de familias”.

Los obispos de Argentina, Venezuela y Perú están elaborando una pastoral para los fieles laicos según las líneas directrices de la V Conferencia del CELAM (Aparecida), como comentamos en el número anterior de nuestro Noticiario. Una mención particular merecen los fieles de Venezuela, que desde hace algunos años padecen graves restricciones de su libertad religiosa y son objeto de injustos ataques por parte del actual gobierno. Los laicos y sus pastores enfrentan valientemente la presente adversidad, sin dejarse arrastrar hacia polémicas estériles o enfrentamientos contraproducentes, sino que permanecen firmes en su fidelidad al Señor en beneficio de todo el país y del mismo gobierno.

En Vietnam, los cristianos son más de seis millones (el 6,8% de la población). La práctica religiosa es alta, entre el ochenta y noventa por ciento. En todas partes, los fieles muestran un interés particular por la Palabra de Dios y el estudio del catequismo, y están deseosos de contribuir en la edificación y el desarrollo de la Iglesia y del país. El gobierno comunista muestra una política contradictoria, caracterizada por una cauta apertura y prepotencias injustificables. De hecho, aún no hay libertad religiosa, la Iglesia está siendo controlada y sus actividades son limitadas. Permanece la ingerencia del estado en el nombramiento de los obispos y en la ordenación de los sacerdotes; obispos, sacerdotes y religiosos son constantemente controlados. El gobierno pone obstáculos y problemas a quien quiera hacerse católico. Faltan lugares de culto, las iglesias que han sido restituidas están en mal estado, y es muy difícil obtener el permiso para construir iglesias y abrir parroquias. Sigue vigente la prohibición de enseñar la religión en los colegios. El estado vigila toda actividad caritativa, social, educativa y cultural de la Iglesia e impone a las familias el control de la natalidad. La Iglesia, a pesar de las restricciones, es muy activa. La mayoría de los fieles se agrupan en organizaciones de apostolado laical. Se observa mucho la preocupación por la formación, especialmente en los contextos urbanos, donde la propaganda atea del estado se une a la difusión de modelos secularizados occidentales. Es muy importante la actividad de evangelización y asistencia que la Iglesia vietnamita ofrece a las minorías étnicas, desatendidas por el gobierno y las instituciones internacionales.

 

 

 

Contactos con asociaciones y movimientos

 

Del mes de enero a finales de junio de 2009, S. Em. el cardenal Stanisław Ryłko, presidente del Consejo Pontificio para los Laicos, recibió a los responsables y representantes de los siguientes movimientos, asociaciones y nuevas comunidades: Istituto Cattolico per l’Evangelizzazione (ICPE Mission); Rinnovamento nello Spirito Santo; Communauté Chemin Neuf; International Catholic Charismatic Renewal Services (ICCRS); Federación Internacional de Movimientos Católicos de Acción Parroquial (FIMCPA); Comunidad de San Egidio; Comunidad de Vida Cristiana; Mouvement International d’Apostolat des Milieux Sociaux Indépendants (MIAMSI); Coordination Internationale de la Jeunesse Ouvrière Chrétienne (CIJOC); Comunità Shalom de Riva del Garda; Comunión y Liberación; Union Mondiale des Organisations Féminines Catholiques (UMOFC); Comunidad del Emmanuel; Comunità Missionaria di Villaregia; Movimiento de Vida Cristiana (MVC); Jeunesse Lumière.

• El 10 de enero, el cardenal Ryłko, junto al secretario del dicasterio Mons. Josef Clemens, participó en el encuentro que, con ocasión del 40º aniversario de la llegada del Camino Neocatecumenal a la diócesis de Roma, Benedicto XVI tuvo en la basílica de San Pedro con los iniciadores Kiko Argüello y Carmen Hernández, las comunidades neocatecumenales romanas, los catequistas itinerantes de todo el mundo y las familias en misión.

• El 30 de enero, el cardenal Ryłko presidió en la iglesia de San Pascual Baylón en Roma, la celebración eucarística anual de gratitud del International Catholic Charismatic Renew­al Services (ICCRS).

• El 28 de febrero, inauguró con una conferencia el curso universitario “Vocación y misión de los laicos en la Iglesia y la sociedad” organizado, con el patrocinio del Consejo Pontificio para los Laicos, por el Fórum Internacional de Acción Católica (FIAC) y la Pontificia Universidad Gregoriana Laikos, con la colaboración de la Comunidad de Vida Cristiana (CVX). El objetivo del curso es presentar la reflexión elaborada y las experiencias maduradas del laicado católico, a veinte años de la exhortación apostólica Christifideles Laici.

• El 17 de abril, celebró la santa misa en el centro romano de apostolado de las consagradas y colaboradoras del Movimiento Apostólico “Regnum Christi”.

• El 25 de abril, celebró en Rímini la santa misa para los participantes en los ejercicios espirituales anuales de la Fraternidad de Comunión y Liberación.

• El 2 de mayo, presidió una de las concelebraciones eucarísticas dentro del programa para los participantes en la 32ª Convocación Nacional de los grupos y comunidades de Rinnovamento nello Spirito Santo, que tuvo lugar en Rímini.

• El 19 de junio, intervino en la Sala de Prensa de Radio Vaticano en la presentación del libro “Essere comunità per fare missione” sobre la historia, la espiritualidad y las actividades de la Comunità Missionaria di Villaregia.

• El 21 de junio, intervino en la celebración del 30º aniversario de fundación de la Associazione Comunità Shalom de Riva del Garda (Trento), pronunciando una conferencia sobre “Institución y carisma en la Iglesia: coesencialidad” y presidiendo la santa misa de clausura del evento.

 

El secretario del dicasterio, S.E. Mons. Josef Clemens, recibió a los responsables y representantes de: Action Catholique des Milieux Indépendants, la Unión Internacional de Guías y Scout de Europa - Federación de Escultismo Europeo (UIGSE-FSE), los Cursillos de Cristiandad, los Foyer de Charité, la Conferencia Internacional Católica del Escultismo (CICE), el Fórum Internacional de Acción Católica, el Movimiento Apostólico “Regnum Christi”, los Scouts et Guides de France, Unum Omnes.

• El 28 de enero, Mons. Clemens pronunció en la Escuela Diocesana de Teología de Fabriano-Matelica una conferencia sobre el tema “Movimientos eclesiales y nuevas comunidades en la misión de la Iglesia: colocación teológica, perspectivas pastorales y misioneras”.

• El 29 de enero, pronunció la misma conferencia a los presbíteros reunidos con S.E. Mons. Giancarlo Vecerrica, obispo de la diócesis.

 

El Prof. Guzmán Carriquiry, subsecretario del dicasterio, recibió la visita de representantes y responsables de:  Movimento Laicale Guanelliano, la Comunidade Católica Palavra Viva, Jesus Youth Movement, Italia Solidale, Escuelas de la Cruz, el Movimento Apostolico y la Coordinación Internacional de la Juventud Obrera Cristiana (CIJOC).

• Representando el dicasterio, el Prof. Carriquiry participó, el 14 de marzo, en la misa en la basílica de S. María la Mayor en Roma, en recuerdo de Chiara Lubich, en el primer aniversario de su muerte.

• El 28 de marzo, en Roma, pronunció una conferencia sobre la nueva época asociativa de los fieles laicos al Curso de formación sobre los veinte años de la exhortación apostólica Christifideles Laici, promovido por el Fórum Internacional de Acción Católica (FIAC) y el Instituto “Laikos” de la Pontificia Universidad Gregoriana, en colaboración con la Comunidad de Vida Cristiana.

• El 23 y 24 de abril, dictó algunas clases al Seminario de investigación sobre algunos aspectos canónicos y pastorales en relación a los movimientos eclesiales y nuevas comunidades, en la Facultad de Teología de Lugano, Suiza.

• El 30 de mayo, participó en Ariccia (Roma), junto a la Srta. Ana Cristina Villa, en el 33º Congreso nacional “El anuncio que se convierte en acción” del Movimento di Spiritualità “Vivere in”, con una conferencia sobre el fomento del laicado.

• El 5 de junio, tuvo un encuentro en Roma, en el Centro internacional de Comunión y Liberación, con los responsables de la asociación estadounidense de la Comisión Pontificia para América Latina y algunos representantes diplomáticos del continente.

 

Mons. Miguel Delgado Galindo, Jefe de oficina del dicasterio, recibió la visita de los responsables y representantes de la asociación estadounidense Priests for Life, y de Foyer de Charité y la Unión Católica Internacional de la Prensa (UCIP).

 

El Rev. Eric Jacquinet, responsable de la Sección Jóvenes del Consejo Pontificio para los Laicos, tuvo, en el ámbito de sus actividades, sendos encuentros con representantes de: el Movimiento de los Focolares, la Union Internationale des Guides et Scouts d’Europe - Fédération du Scoutisme Européen, la Comunidad del Arca de Rennes, el Fórum Internacional de Acción Católica, la Comunidad del Emmanuel, la Communauté du Verbe de Vie, el grupo Anuncio, el Mouvement Eucharistique des Jeunes, el AGESCI, los Scouts et Guides de France, el Escultismo Católico Portugués, las Escuelas de evangelización de Paray le Monial (Francia) y de Altötting (Alemania) animadas por la Comunidad del Emmanuel, la asociación Pèlerins danseurs de Namur (Bélgica), de la Communauté Chemin Neuf.

 

La Srta. Ana Cristina Villa Betancourt se encontró con representantes de la Unión Mundial de las Organizaciones Femeninas Católicas (UMOFC).

 

 

Otros encuentros

 

El presidente del dicasterio, S.Em. cardenal Stanisław Ryłko, recibió, en el curso de los primeros meses del año, la visita de: S.E. Mons. Edward Philip Wilson, presidente de la Conferencia Episcopal Australiana; S.E. Mons. Julian Charles Porteous, obispo auxiliar de Sydney (Australia); S.E. Mons. Pierre d’Ornellas, arzobispo de Rennes (Francia); S.E. Mons. Henryk Marian Tomasik, obispo auxiliar de Siedlce (Polonia); S.Em. el cardenal Antonio María Rouco Varela, arzobispo de Madrid (España); S.E. Mons. Dominique Rey, obispo de Fréjus-Toulon (Francia), acompañado por alcaldes y exponentes políticos de la diócesis; Mons. Livio Melina, presidente del Pontificio Instituto Juan Pablo II para los Estudios sobre el Matrimonio y la Familia de Roma. Recibió también la visita de responsables de la Conferencia de Religiosos Canadienses; del Comité ejecutivo de la Unión de las Conferencias Europeas de los Superiores y Superioras Mayores (UCESM); del Sr. Fernando Martín Herráez, nuevo presidente de la Conferencia Mundial de Institutos Seculares (CMIS); de la Sra. Encarnación del Pozo, nueva ministra general de la Orden Franciscana Seglar (OFS); de responsables del Fórum Europeo de los Comités Nacionales de los Laicos; de la asociación World Vision International; de la Scuola di Cultura Cattolica di Bassano del Grappa (Vicenza, Italia).

• Asimismo, presidió y guió las sesiones de trabajo del Congreso teológico-pastoral que se realizó en el contexto del VI Encuentro Mundial de las Familias, organizado en la Ciudad de México por el Pontificio Consejo para la Familia, en los días 14-18 de enero, sobre el tema “La familia formadora de los valores humanos y cristianos”.

• Participó en la Asamblea plenaria de la Pontificia Comisión para América Latina, que tuvo lugar en el Vaticano del 17 al 20 de febrero sobre el tema “La situación actual de la formación de los sacerdotes en los seminarios de América Latina”.

• El 13 de marzo, presidió la celebración eucarística de gratitud por el 26º aniversario del Centro Internacional Juvenil San Lorenzo.

• El 24 de abril, dio inicio a los trabajos de la jornada de estudio, organizada por la Cátedra Karol Wojtyła del Pontificio Instituto Juan Pablo II para los Estudios sobre Matrimonio y Familia, sobre el tema “El amor y su regla: la espiritualidad conyugal según Karol Wojtyła”.

• En el ámbito de los encuentros organizados en Lamezia Terme (Catanzaro, Italia) para las celebraciones del Año Paulino, por invitación de S.E. Mons. Luciano Cantafora, el 8 de mayo el cardenal Ryłko pronunció un discurso sobre “El sacerdote y los movimientos” al clero diocesano, y presidió una solemne concelebración eucarística para las asociaciones y los movimientos de la diócesis.

• El 30 de mayo, durante un encuentro con los sacerdotes de la archidiócesis de Varsovia (Polonia), pronunció una conferencia sobre “La formación de los fieles laicos, grande desafío de nuestros tiempos”.

 

El secretario S.E. Mons. Josef Clemens, recibió a: la presidencia del CELAM; a S.E. Mons. Egon Kapellari, obispo de Graz-Seckau (Austria), acompañado por Rev. Kart Schauer y el Sr. Helmut Pertl, respectivamente rector del santuario de Mariazell y alcalde de la ciudad; S.E. Mons. Ivan Prendja, arzobispo de Zadar (Croacia); S.E. Mons. Jean-Christophe Lagleize de la diócesis de Valence (Francia); S.E. Mons. Karl-Heinz Wiesemann, obispo de Espira (Alemania); S.E. Mons. Walter Mixa con los decanos de la diócesis de Augsburgo (Alemania); S.E. Mons. Benoît Rivière, obispo de Autun (Francia); S.E. Mons. Paul Khoarai, obispo de la diócesis de Leribe (Lesotho); S.E. Mons. Manfred Scheuer, obispo de la diócesis di Innsbruck (Austria); S.E. Mons. Reinhard Marx, arzobispo de Munich y Frisinga (Alemania); Hno. Alois Löser, prior de Taizé; Dr. Manfred Lütz, la Sra. Christiana Habsburg-Lothringen y el Sr. Edio Costantini, miembros del Consejo Pontificio para los Laicos; el Comité ejecutivo de The Hong Kong Central Council of Catholic Laity; los responsables del Centro Sportivo Italiano; Lord Daniel Brennan, presidente de la Unión Católica de Gran Bretaña.

• El 10 de febrero, Mons. Clemens presidió la celebración eucarística en la basílica de San Pedro en el Vaticano para los miembros de la Oficina de la Pastoral del Circo de la Conferencia Episcopal Alemana.

• El 19 de febrero, intervino en la conferencia de prensa de presentación de la tercera edición de la “Clericus Cup” en la sede del CONI en Roma.

• El 24 de marzo, participó, en Radio Vaticano, en la conferencia de prensa de presentación del evento deportivo-cultural-religioso “Correr en las huellas de San Pablo, de Jerusalén a Roma, 23 de abril-27 de mayo”.

• Del 18 al 23 de abril, presidió en Jerusalén-Belén el 6º maratón/peregrinación en Tierra Santa, organizado por la Fundación Juan Pablo II para el Deporte en colaboración con la Sección “Iglesia y Deporte” del Consejo Pontificio para los Laicos y diferentes asociaciones deportivas, primera etapa del evento “Correr en las huellas de San Pablo”.

• El 22 de mayo, llevó el saludo al Congreso “Deporte, religión y relaciones internacionales. El aporte de los católicos”, organizado en Roma, en la Sala de Convenciones de los Museos Vaticanos, por el Centro Sportivo Italiano (CSI). Al Congreso participó también el Rev. P. Kevin Lixey.

• El 26 de mayo, presentó las conclusiones en el Seminario de estudio sobre la pastoral del deporte a la luz de los escritos de San Pablo “Vince in bono malum”, que se realizó en el Pontificio Colegio Urbano “De propaganda fide”. En el Seminario participó también el Rev. P. Lixey.

 

El subsecretario Prof. Guzmán Carriquiry recibió el Comité ejecutivo de The Hong Kong Central Council of Catholic Laity y representantes de las Sociedades Bíblicas Unidas.

• El 13 de marzo, en Lecce (Italia), con ocasión de la “Semana de la fe” promovida por la archidiócesis, pronunció una conferencia sobre “Vocación y misión de los fieles laicos, hoy”.

• El 4 de junio, tuvo en Roma una conferencia dentro del ciclo de encuentros organizados por el Instituto de investigación “Mulieris Dignitatem”, de la Pontifica facultad teológica “San Buenaventura”, sobre el tema “El trabajo a la luz de la Doctrina social de la Iglesia”.

• El 11 de junio, pronunció una conferencia en el Pontificio Colegio Mater Ecclesiae de Roma a un grupo de jóvenes formadores del Movimiento Apostólico “Regnum Christi”.

El Rev. Eric Jacquinet se encontró con los responsables del servicio pastoral de los jóvenes de la Conferencia de los Obispos de Francia y de la Conferencia Episcopal Italiana, del Comité nacional suizo de las JMJ, los responsables del Centro “Juan Pablo II” de Loreto junto a S.E. Mons. Giovanni Tonucci, delegado pontificio del santuario lauretano, y los responsables de las diócesis de Roma, París, Rennes, Evreux y Montpellier (Francia).

Asimismo se encontró con: S.E. Mons. Marc Aillet, obispo de Bayona (Francia), y un grupo de sacerdotes de su diócesis; el Rev. P. Xavier d’Arodes, consejero eclesiástico de la Embajada de Francia ante la Santa Sede; dirigentes de Radio Espérance (Francia).

• Del 30 de mayo al 2 junio, el Rev. Jacquinet guió una delegación del Centro Internacional Juvenil San Lorenzo en peregrinación con la Cruz de las JMJ a la región del Abruzo, por las zonas devastadas por el terremoto en la provincia de Áquila.

• Participó del 7 al 9 de junio en el Congreso organizado en Kielce (Polonia) sobre “Juan Pablo II y los jóvenes”.

• Participó en París, el 13 de junio, en el encuentro de los responsables de la pastoral juvenil de las diócesis de Francia, en preparación de la JMJ de Madrid 2011.

El Rev. P. Kevin Lixey, responsable de la Sección “Iglesia y Deporte”, tuvo un encuentro con: el Sr. Edio Costantini, miembro del Consejo Pontificio para los Laicos y presidente de la Fundación Juan Pablo II para el Deporte; el Gral. Gianni Gola, presidente del Consejo Internacional del Deporte Militar (CISM) junto al comandante de la Guardia Suiza Daniel Anrig; algunos representantes del grupo “I pellegrini di Verona”; los responsables de los Polideportivos Juveniles Salesianos; el Sr. Pius Segmüller de la Federación Internacional de las Asociaciones de Fútbol (FIFA).

• Del 16 al 19 de abril, el P. Lixey participó en el Congreso de la Federación Internacional Católica de Educación Física y Deportiva (FICEP) que tuvo lugar en Praga (República Checa), con una conferencia sobre el significado del Año Paulino, el deporte y su implicación en el campo educativo.

• Del 23 de abril al 27 de mayo, participó en algunas etapas (en Grecia, Malta, Italia, Pozzuoli y Roma) del “maratón-relevos” Correr en las huellas de San Pablo, organizado por la Fundación Juan Pablo II para el Deporte.

 

La Srta. Ana Cristina Villa Betancourt se encontró con: el Rev. P. Philip Chavez, fundador y director de “Amador Institute”; la Sra. Margherite A, Peeters, directora del Instituto para las Dinámicas de Diálogo Intercultural de Bruselas (Bélgica); el Rev. P. Zdzislaw Josef Kijas y la Prof. Laura Tortorella, respectivamente director científico y director didáctico del Instituto “Mulieris Dignitatem” para los estudios sobre la unidualidad hombre-mujer.

• La Srta. Villa participó además, el 1 de junio, en el curso “Women in the Well”, organizado en Roma por el Lay Centre Foyer Unitas, pronunciando la conferencia “Women in the Church Today”.

El Rev. Antonio Grappone representó al dicasterio en el Simposio “La Penitenciaría Apostólica y el sacramento de la penitencia. Recorridos histórico-jurídico-teológicos y perspectivas pastorales”, que tuvo lugar en Roma en el Palacio de la Cancillería, el 13 y 14 de enero.

• Participó en el XXIX Convenio del Instituto Vittorio Bachelet, organizado por la Azione Cattolica Italiana sobre el tema: “Crisis de la política y el bien común. En búsqueda de una renovada ética pública”, que tuvo lugar en Roma el 13 y 14 de febrero.

S.Em. el cardenal Stanisław Ryłko recibió la visita: del presidente del Senado de Canadá, el Sr. Noël Kinsella, acompañado por dos senadores y la embajadora de Canadá ante la Santa Sede, Sra. Anne Leahy; el Sr. Larry Yu-yuan Wang, embajador de China ante la Santa Sede; la Sra. Julieta Vals Noyes, encargada de asuntos a.i., y el Sr. Rafael Patrick Foley, de la Embajada de los Estados Unidos ante la Santa Sede.

S.E. Mons. Josef Clemens tuvo un encuentro con: el ministro presidente de Baviera, Sr. Horst Seehofer; el Sr. Hans-Henning Horst­mann, embajador de la República Federal de Alemania ante la Santa Sede; el Sr. Francis Campbell, embajador de Gran Bretaña ante la Santa Sede; la Sra. Hanna Suchocka, embajadora de Polonia ante la Santa Sede.

 

 

 

El subsecretario del dicastero celebró cuarenta años de matrimonio

El 26 de junio de 2009, el subsecretario del Consejo Pontificio para los Laicos, Prof. Guzmán Carriquiry, y su mujer, la Sra. Lídice Gómez, festejaron el 40º aniversario de su matrimonio con una celebración eucarística presidida por S.Em. el cardenal Angelo Comastri en el altar de la cátedra de la basílica de San Pedro, una verdadera acción de gracias por los años transcurridos juntos, mucho de los cuales – treinta y siete – vividos por el abogado al servicio de la Santa Sede. Participaron en la celebración siete cardenales, quince obispos y más de cincuenta sacerdotes, asimismo un numeroso grupo de colegas de la Curia Romana, representantes del Cuerpo Diplomático, responsables de asociaciones, movimientos eclesiales y nuevas comunidades y amigos italianos y latinoamericanos. A la celebración le siguió la recepción en los jardines vaticanos, donde también estuvo presente el Secretario de Estado S.Em. el cardenal Tarcisio Bertone. También los oficiales y superiores del dicasterio expresaron al matrimonio su alegría por haber alcanzado esta etapa tan significativa.

 

 

 


 

top