EVANGELII GAUDIUM - page 4

4
en el Espíritu que brota del corazón de Cristo
resucitado.
3. Invito a cada cristiano, en cualquier lugar y
situación en que se encuentre, a renovar ahora
mismo su encuentro personal con Jesucristo o,
al menos, a tomar la decisión de dejarse encon-
trar por Él, de intentarlo cada día sin descanso.
No hay razón para que alguien piense que esta
invitación no es para él, porque « nadie queda ex-
cluido de la alegría reportada por el Señor ».
1
Al
que arriesga, el Señor no lo defrauda, y cuando
alguien da un pequeño paso hacia Jesús, descu-
bre que Él ya esperaba su llegada con los brazos
abiertos. Éste es el momento para decirle a Je-
sucristo: « Señor, me he dejado engañar, de mil
maneras escapé de tu amor, pero aquí estoy otra
vez para renovar mi alianza contigo. Te necesito.
Rescátame de nuevo, Señor, acéptame una vez
más entre tus brazos redentores ». ¡Nos hace tan-
to bien volver a Él cuando nos hemos perdido!
Insisto una vez más: Dios no se cansa nunca de
perdonar, somos nosotros los que nos cansamos
de acudir a su misericordia. Aquel que nos in-
vitó a perdonar « setenta veces siete » (
Mt
18,22)
nos da ejemplo: Él perdona setenta veces siete.
Nos vuelve a cargar sobre sus hombros una y
otra vez. Nadie podrá quitarnos la dignidad que
nos otorga este amor infinito e inquebrantable.
Él nos permite levantar la cabeza y volver a em-
1
 P
ablo
VI, Exhort. ap.
Gaudete in Domino
(9 mayo 1975),
22:
AAS
67 (1975), 297.
1,2,3 5,6,7,8,9,10,11,12,13,14,...224
Powered by FlippingBook