JUAN PABLO II
ÁNGELUS
Domingo de Ramos, 31 de marzo de 1985
1. A la hora del "Ángelus" de este Domingo de Ramos, que la liturgia llama también Domingo de la Pasión del Señor, el pensamiento se nos va a María inmersa en el misterio de su inmenso dolor.
María acompañó a su Hijo divino con el más discreto silencio, meditando todo en su corazón. A los pies de la cruz en el Calvario, en la amplitud y profundidad de su sacrificio materno, tiene junto a Sí a Juan, el Apóstol más joven. Y a él precisamente se dirige el Divino moribundo para darle un encargo de amor y confianza: "He ahí a tu Madre" (Jn 19, 27).
Este encargo sagrado os lo repito a vosotros, amadísimos jóvenes, mis amigos. He ahí a María, ¡Madre vuestra! La Madre de vuestra juventud. Modelo ejemplar en quien inspiraros. Apoyo en quien sosteneros en las dificultades de la vida.
2. Con la celebración de hoy comienza la "Semana grande" dedicada a los supremos acontecimientos de la existencia terrena de Cristo. Serán días de oración, silencio, meditación. El paso del Hijo de Dios de la vida a la muerte y de la muerte a la resurrección no puede quedar: reducido a mero recuerdo histórico os sentimental. El misterio pascual, quiere dejar un surco en los corazones y en la tierra misma de la civilización.
La Iglesia le dedica una particular solicitud pastoral al llamar a los fieles a la Mesa eucarística, haciéndose amorosa intérprete de la aspiración del Señor: "Ardientemente he deseado comer esta Pascua con vosotros" (Lc 22, 14).
Al deseo del Redentor corresponda generosamente nuestro deseo, con la ayuda de María la Corredentora, a la que elevamos con todo ardor nuestra oración.
3. Al concludersi di questa solenne e gioiosa cerimonia, desidero rivolgere a tutti i giovani il mio cordiale saluto unito a un sincero arrivederci!
Il mio saluto e il mio apprezzamento vanno ai giovani italiani, ai quali dico: sia sempre Cristo l’amico più forte della vostra giovinezza, la luce più luminosa della vostra ricerca, la via più sicura per i vostri passi nel cammino della vita!
È questo il mio augurio, che accompagno con la mia fervida preghiera.
4. Al terminar este encuentro con vosotros, queridos jóvenes venidos de España y de los Países de América Latina, os doy mi más cordial saludo. El Año Internacional de la Juventud os invita a ofrecer vuestra aportación entusiasta al bien del hombre hermano, de la sociedad y de la Iglesia en el momento actual. Recordad siempre que Cristo ha de estar en el centro de vuestra vida, para que ésta tenga sentido pleno. Llenaos, pues, de El y llevadlo por los caminos del mundo.
5. Dear young people: you have come to Rome in order to proclaim Jesus Christ in the midst of this vast assembly of your brothers and sisters. You are called upon to proclaim him in prayer, and to bear witness to him by the authentic activities of your daily Christian lives. When you open your hearts to Jesus, he leads you by the power of his Passion and death to share with him the victory of his Resurrection. If you continue to follow Jesus, you will share the fullness of his risen life.
6. Chers jeunes, en cette année qui est la vôtre, vous représentez ici vos camarades du monde entier. Alors que commence la Grande Semaine qui nous conduit à Pâques, je dis à tous: suivez le chemin du Christ, lui que nous avons acclamé par cette célébration des Rameaux! Restez fidèles au Fils de Dieu venu parmi les hommes pour être le Sauveur, soyez pour toutes les nations les témoins de l’espérance!
7. Am Ende dieser festlichen Palmsonntagsliturgie wende ich mich noch einmal an euch alle, liebe junge Freunde. Es war schön, zusammen mit euch zu beten und zu singen, Eucharistie zu feiern und Gott die Ehre zu geben. Er begleite euren weiteren Lebensweg mit seiner Liebe und Treue! Auf ihn könnt ihr bauen!
8. Queridos jovens de língua portuguêsa: aclamamos juntos, com o entusiasmo que é próprio da juventude, Cristo nosso Rei e Salvador. Dou-vos agora a minha Bênção para que sejais verdadeiras testemunhas do seu amor e do seu Evangelho junto dos vossos lares e dos vossos conterrâneos, levando a todos alegria e esperança.
9. Pozdravljam mlade Hvrate prisutne ovdje na trgu Svetoga Petra. Kris neka uvijek vaš prijatelj vodja na vašem putu. Hvaljen Isus i Marija!
10. Iz srca pozdravljam tudi vse mlade Slovence. Jezus Kristus, zaradi katerega ste prišli v Rim, naj bo vedno vaš prijatelj in vodnik.
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