CARTA DE SU SANTIDAD JUAN PABLO II
AL GUARDIÁN DE LA BASÍLICA DE ASÍS EN EL 750 ANIVERSARIO
DE LA SEPULTURA DE SAN FRANCISCO

Rvdo. p. Bernardino Farnetani,
guardián de la basílica de San Francisco, en Asís (Italia).

En la solemne circunstancia del 750 aniversario de la sepultura de San Francisco en esa basílica, me complazco en dirigirme a usted y a toda la comunidad que custodia los restos del Santo, asegurándoles mi intensa participación espiritual en el jubiloso acontecimiento.

Me siento feliz al seguir, de ese modo, el ejemplo de mi lejano predecesor, el Papa Gregorio IX, que quiso se construyera la maravillosa iglesia sepulcral sobre la "Colina del paraíso", y colocó personalmente la primera piedra; y me alegra proseguir idealmente la peregrinación de fe y de oración que realicé ahí al comienzo de mi pontificado.

Pretendo así rendir homenaje al Santo, que brilla en la Iglesia por su sencilla y extraordinaria adhesión al Evangelio de Jesucristo, conformándose a El en la humilde pobreza y en la alegría de la cruz, en el amor genuino a los hombres y en la jubilosa admiración por la belleza de todas las criaturas.

Agradezco profundamente al Señor el haber suscitado una luz así, capaz de "alumbrar a cuantos hay en la casa" (Mt 5, 15); exhorto a todas las familias franciscanas a que sean siempre fieles al espíritu del fundador y ruego a Dios que no permita que falte nunca a su Iglesia la abundancia de una igual, fecundísima gracia.

En prenda de estos votos, deseo conceder, muy de corazón, mi bendición apostólica a usted, a sus hermanos, a los fieles de esa ciudad y a todos los devotos del "Poverello" de Asís.

Vaticano, 22 de mayo de 1980, II año de mi pontificado.

IOANNES PAULUS PP. II

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