MENSAJE DEL SANTO PADRE JUAN XXIII
CON MOTIVO DE LA COPA MUNDIAL DE FÚTBOL DE 1962*
A nuestro hijo el cardenal Raúl Silva Henríquez,
arzobispo de Santiago de Chile.
Gustosamente accedemos al deseo que Nos ha sido expresado de dirigir unas palabras de saludo a la pléyade de jóvenes atletas reunidos en esa hospitalaria ciudad de Santiago de Chile para las magnas competiciones deportivas que con carácter mundial tendrán lugar en los próximos días.
Este acontecimiento Nos depara la oportunidad de subrayar cómo el sano deporte lleva en sí aspiraciones que están radicadas en el corazón mismo de los hombres y de los pueblos, amantes de rendir el honor debido a los valores físicos y a la armonía de los miembros del cuerpo; y ha de ofrecer él también a los espíritus nobles motivo y ocasión para remontarse a la consideración del servicio que tales valores pueden y deben prestar a ideales superiores de perfección y belleza interior, de disciplina y dominio de sí mismo, en anhelo de emulación recíproca que conduzca serena y gozosa hacia la fraternidad universal y la concordia entre las naciones.
Formulando, Pues, sinceros votos por que tan memorables celebraciones sean marco espléndido a estas virtudes, e impriman impulso y vigor para más elevadas metas, invocamos sobre los deportistas, organizadores y participantes todos la abundancia las divinas bendiciones.
El Vaticano, 22 de mayo de 1962.
JUAN PP XXIII
* AAS 54 (1962) 467.
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