JUAN PABLO II
ÁNGELUS
Domingo 9 de noviembre de 2003
Al final de esta celebración, deseo saludar a todos los peregrinos presentes.
Saludo a los peregrinos de lengua francesa que han venido para la beatificación del padre Valentín Paquay y de sor Rosalía Rendu, especialmente a los miembros de sus familias religiosas, a los obispos y a los responsables de la sociedad civil.
Saludo cordialmente a los obispos, sacerdotes y fieles de lengua española, así como a las autoridades civiles presentes en la beatificación de Juan Nepomuceno Zegrí y de la madre Bonifacia Rodríguez. Muy especialmente saludo a las Mercedarias de la Caridad y a las Siervas de San José.
Saludo también a los peregrinos que han venido de Polonia; Dios os bendiga a todos. Saludo a los peregrinos que han venido de Italia y de otros países, de modo especial a los Hijos de la Inmaculada Concepción, que están de fiesta por la beatificación de su fundador, Luis María Monti.
Doy las gracias por su presencia a los obispos y a las autoridades civiles. Nos dirigimos ahora con la oración a María, Reina de los santos y modelo de los cristianos.
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