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   Libro, Parte, Can.

 1   2,   2,   333|     particulares encomendadas a su cuidado.~ § 2.    Al ejercer su
 2   2,   2,   369|           del pueblo de Dios, cuyo cuidado pastoral se encomienda al
 3   2,   2,   376|           que se ha encomendado el cuidado de una diócesis; los demás
 4   2,   2,   461|        Obispo tiene encomendado el cuidado de varias diócesis, o es
 5   2,   2,   491|           que en él se guarden con cuidado y se ordenen de modo sistemático
 6   2,   2,   543| solidariamente a los sacerdotes el cuidado pastoral de alguna parroquia
 7   2,   2,   544|         parroquias encomendadas al cuidado del grupo; pero corresponde
 8   2,   2,   566|    facultades que requiere el buen cuidado pastoral. Además de aquellas
 9   2,   3,   594|            el c. 586, está bajo el cuidado especial del Obispo diocesano.~
10   2,   3,   613|        monjes bajo el régimen y el cuidado del Superior propio es autónoma,
11   2,   3,   628|         miembros encomendados a su cuidado, según las prescripciones
12   2,   3,   642|                  642 Con vigilante cuidado, los Superiores admitirán
13   2,   3,   687|        queda bajo la dependencia y cuidado de sus Superiores y también
14   2,   3,   745|        sigue, sin embargo, bajo el cuidado de los Moderadores. Si se
15   2,   3,   745|            debe residir, bajo cuyo cuidado y dependencia permanece
16   3,   0,   753|           fieles encomendados a su cuidado, y los fieles están obligados
17   4,   1,   934|         haber siempre alguien a su cuidado y, en la medida de lo posible,
18   5,   0,  1284|           bienes encomendados a su cuidado no perezcan en modo alguno
19   7,   2,  1598|      manifestado a nadie, teniendo cuidado de que siempre quede a salvo